31 de julio de 2025

Petrus - Aged Red

Acabo el mes de julio precisamente acabándome el pack de 6 cervezas Petrus que me compré de oferta en el LIDL el año pasado. Reconozco que me ha dado muchísima pereza finiquitarlo.

La de hoy se llamaba Aged Red (actualmente se llama Red a secas) y en teoría lleva un 15% de cerveza añejada en Fudre y un 85% de su Dubbel. La receta lleva malta de cebada (no especifica cuales), lúpulo (no especifica qué variedades, levadura (tampoco indica qué fermentaciones lleva cada cerveza por separado), agua (obvio), un 10% de lo que dice ser zumo de cereza (yo más bien diría sirope de cereza), azúcar y aromatizante. Así de entrada tira bastante para atrás.

Pues nada, valor y al toro. La sirvo en copa TeKu. Hombre, eso de reeeed... cualquiera que en su mocedad haya visto Barrio Sésamo te diría que marrón oscuro. Dejémoslo en un caoba para contentar al fabricante. Muy carbonatada, con la fiesta de la espuma Pacha Ibiza style, hay que servirla con cuidado para que la cosa no se vaya de madre. Espuma de color beis, muy abundante, muy tupida, cremosa y muy persistente.

En nariz básicamente sirope de cereza y aromas de malta tostada. En boca es una piruleta. No es un sabor desagradable, ni mucho menos, pero sabe a golosina, a sirope de cereza. No es un sabor natural y a mí personalmente me arruina la experiencia gastronómica. Ojo, otra cosa es que te la bebas como un refresco azucarado sin más pretensiones. Dulzona, edulcorada, con el sabor tostado de fondo, la parte ácida ni se la ve de lejos de lo azucarada que está. Resumiendo, un despropósito. El alcohol está muy bien integrado, no se nota en absoluto, salvo por la taja que vas a pillar como no hayas comido algo (8,5%). La verdad es que si no fuera por el bajo precio (1,66€) y por el ansia de añadir más muescas en untrapper, la verdad es que os la podéis ahorrar perfectamente.

30 de julio de 2025

Martin's - Gordon Finest Chrome

Hace unas semanas la app Untrapper nos anunciaba la llegada de nuevas insignias para sus "boy scouts licoretas". Una de ellas consistía en catar al menos 5 cervezas del estilo Malt Liquor, que para ser honesto, desconocía su existencia.

El estilo no está reconocido como tal, pero el BJCP sí lo incluye dentro de Specialty Beer, junto con muchos otros. Bien, a mí que lo reconozca el BJCP o mi tío Paco me la trae al pairo, yo lo que quiero es conseguir el puto "cromo", así que me he confeccionado una lista de los que podría conseguir fácilmente en algún supermercado cercano.

La primera con la que he ido a dar (y que supone la tercera muesca en mi haber para conseguir la insignia de marras, ya que se ve que había bebido previamente otras dos) ha sido la Gordon Finest Chrome, de la cervecera belga Martin's (antes John Martin). Por lo visto ha debido palmar John y ahora ha cogido las riendas de la empresa su hijo Anthony.

Previamente, por aquí había pasado su Gordon Finest Titanium, también otro Malt Liquor, que yo por entonces etiqueté como Strong Pale Lager, que es lo que debía aparecer en el ya difunto RateBeer. Como han eliminado absolutamente todo lo que había en RateBeer no puedo comprobarlo.

Al turrón. La sirvo en vaso nonic, no vaya a ser que con la previsible cogorza que pillaré, se me vaya a deslizar el vaso y la líe parda en la cocina de casa. Y es que la broma tiene un 10,5% de alcohol y viene en formato yonkilata de 50cl. Presenta un color dorado totalmente límpido, sin impurezas. Bien de carbonatación, sin esfuerzo logro sacarle una gruesa corona de espuma blanca, compacta y persistente.

En nariz básicamente huele a cebada, un olor a cerveza industrial de toda la vida con el puntito del alcohol, que afortunadamente es menos molesto de lo que me esperaba. En boca es una cerveza que afortunadamente se bebe mucho mejor de lo que me esperaba. No es una cerveza como para bebérsela de un trago (ultrabebestible precisamente no es), pero oye, para la graduación que tiene ni tan mal. Demasiado dulzona para mi gusto, un pelín empalagosa, perfil maltoso, de cebada, básicamente y poca cosa más. El alcohol en boca se nota, pero tampoco tienes la sensación de estar bebiéndote un cubatazo. La verdad es que no le encuentro la gracia a este estilo y las únicas que veréis por aquí en un futuro serán las dos que me faltan para conseguir la insignia en cuestión. Creo que me costó 1,55€ en el supermercado Consum. Al menos la gracia no me ha salido cara.

24 de julio de 2025

Bionoc' - Pescanoc'

Continúo escribiendo acerca del producto italiano. En esta ocasión la cerveza no la compré allí, sino aquí.

Hace unos días estuve en Terrassa y me acerqué a Casa Evaristo, donde, desde hace años, sabía que contaban con una extensa selección de cerveza artesanal. No lo había visitado antes porque las referencias que me habían dado es que tenían el producto sin refrigerar y por tanto echado a perder. No obstante me acerqué.

Para satisfacción de uno comprobé que en Casa Evaristo han hecho los deberes y han puesto una fantástica nevera para el género lupulizado. Como no me interesaba otra NEIPA más en mi historial fui a la sección no lupulada (ésta sin refrigerar) donde para sorpresa del que suscribe, fui a dar con uno de los birrificios italianos que se dedican a elaborar cervezas Farmhouse y de fermentación espontánea: Bionoc'.

Se vino con papá de inmediato, ya que es prácticamente imposible encontrar referencias de los de Mezzano di Primiero en nuestro país. Además la habían rebajado un eurazo porque no estaba teniendo salida. En Terrassa no hay farmhousegeeks, que se le va a hacer.

Del birrificio Bionoc' ya os hablé hace unos años, cuando pude conocerlos en persona y catar algunas de sus increíbles cervezas en el Rustic & Wild de 2023. El birrificio fue creado en 2012 por Fabio Simoni y Nicola Simion. Llevaban elaborando cerveza como homebrewers desde 2006 en el garaje de casa. Sus incesantes ganas de mejorar, de investigar, de contrastar opiniones y de viajar los llevaron a perfeccionar su producto y dominar el tema de las fermentaciones espontáneas. Utilizan materia prima de sus vecinos agricultores. Actualmente su fábrica, en mitad de los montes Dolomitas, se abastece única y exclusivamente de energías renovables.

Al lio. El ejemplar con el que fui a dar fue Pescanoc', una Fruited Sour Lager elaborada con malta de cebada, centeno, lúpulo trentino y melocotones. La sirvo en copa TeKu. Presenta un color dorado amelocotonado, límpida, sin turbidez. Tengo que escanciar bastante para conseguir sacarle una capa de espuma blanca, no muy abundante y que desaparece rápidamente.

En nariz se huele ya la rusticidad, la avanzadilla de la acidez den boca y un puntito de melocotón. En boca es de cuerpo ligero pese a su 6,3% de alcohol. Muy refrescante, de acidez notable, mas no chirriante. Altas dosis de rusticidad y de sabores granjeros. El melocotón muy sutil, muy fino, muy suave pero delicioso. La verdad es que me ha sorprendido bastante y no sé que cepa de Lager habrán utilizado para elaborarla. Loquito me he quedao. Una cerveza para paladares un poco más experimentados. Entiendo que haya personas a las que les pueda no agradar. A mí me ha encantado. Me costó 4,99€. Botella de 33cl.

23 de julio de 2025

Crazy Beer - Rossa

La única cerveza artesanal en formato botella que pude disfrutar durante mis vacaciones en Roma fue esta fantástica Regina Rossa en el restaurante Crazy Pizza.

El negocio -que cuenta con varios locales en Roma- realiza sus cervezas por encargo en las instalaciones de La Buttiga (Piacenza) bajo el nombre de Crazy Beer.

Según me explicó la amable camarera, cuentan con tres variedades: una Italian Pilsner, una Witbier y una English Bitter, que es la que nos atañe hoy. La botella venía con su correspondiente sello independiente de la UnionBirrai. Igualito que aquí.

La sirvo en el vaso que me proporciona el establecimiento. Presenta un color ámbar con tendencias a lo rojizo. Buena corona de espuma compacta, de color blanco y de persistencia media.

En boca es una cerveza maltosa, con el cereal bien presente, con notas acarameladas y un sorprendente gusto a lúpulo bastante notable. El lúpulo aporta sabores afrutados agradables y notas florales muy ricas. En general me ha sorprendido mucho en positivo. Riquísima, muy bebestible y la verdad es que me alegró la comida. 4,2%. Botella de 33cl.

22 de julio de 2025

Beer Time - Roma

 

Hace un par de semanas viajé a Roma con la familia al completo. Y cuando digo al completo no me refiero solo a esposa e hijos, incluyo padres, hermanos, sobrina, cuñados e incluso suegra. Un viaje corto de tan solo cuatro días, que entre el avión de ida y el avión de vuelta se reduce a dos y medio, y que al tratarse de un viaje familiar y con un número abundante de personas ya di por perdida cualquier opción de cerveceo. No obstante, yo iba con mi mapa preparadísimo por si sonaba la flauta. Y sonó.

Mientras preparaba dicho mapa, tuve que eliminar un gran número de pins de cervecerías y tiendas de la ciudad eterna que lamentablemente han tenido que cerrar sus puertas de manera permanente -con negocios emblemáticos como Bir&Fud o Brasserie 4.20- de manera que me temo que en territorio italiano está la cosa a la baja, de igual manera que está sucediendo en Madrid o en Barcelona. A la vista está.

De cualquier modo, la oferta cervecera craft en Roma sigue siendo buena pese a las numerosísimas bajas. También admito haberme llevado otro chasco más en el sentido que, hace dos años, durante mis vacaciones por la Reggio Emilia, pude disfrutar de cerveza artesanal en todos y cada uno de los negocios hosteleros que visité, y sin embargo, en esta ocasión, en pleno corazón del Imperio Romano me he tenido que resignar a tomar cerveza italiana industrial, o si la cosa se ponía insufrible, al vino o el chinotto.

Al lío. El día de nuestra llegada tan solo nos dio para dejar el equipaje en el hotel y salir a cenar. La zona elegida como campamento base fue el barrio de Prati, muy cercano al Vaticano. Fuimos a cenar a un maravilloso restaurante de comida típica de la región (lamentablemente con cerveza industrial, le di al Prosecco). Al finalizar el ágape me llevé a los niños a una heladería espectacular, pero papi ya tenía pensado de antemano donde iba a tomar su postre, así que cuando se acabaron sus helados pusimos rumbo a Beer Time, a tan solo una manzana de nuestro alojamiento.

Beer Time se encuentra en la Piazza dei Quiriti (no confundir con la tienda con el mismo nombre que se ubica en el barrio de Balduina). No es una cervecería muy grande, pero cuenta con una generosa terraza, que se adapta a la fisonomía de los edificios que lindan con la redonda plaza. El calor asfixiante de la ciudad eterna incita a usar su terraza de noche, cuando baja la temperatura.

En el interior nos da la bienvenida su barra, que cuenta con siete grifos rotatorios, uno de ellos de bomba de mano. En el momento de nuestra visita contaban únicamente con cerveza local, de productores como B94, AltoTevere, Shire, Shigibier, Elvo y Bonavena. Selección bastante variadita, con Italian Grape Ale, una Bitter, una Coffee Porter, una Keller Pils, una Belgian Blonde y varias IPAs. Por si a alguien no le convence el repertorio cuentan con una nevera donde podemos encontrar cositas de Ca' del Brado, Mastino, Rurale, La Buttiga, Amiata, De Ranke, Forged Dublin,Kinnegar, Dundale Bay, Beerbliotek, o Ayinger, entre otros.

El espacio que queda comprendido entre la entrada y la barra es muy pequeño y solo da para unos pocos taburetes, pero a la derecha hay una sala un poquito más espaciosa con una pantalla grande para ver los deportes.

Cuentan con una buena carta de tapas y bocatas para acompañar a nuestra bebida favorita: tablas de quesos y embutidos, cuatro tipos de pizzettas, ensaladas variadas, varios tipos de bruschetta y una infinidad de panini con innumerables ingredientes.

No pudimos disfrutar de su cocina porque ya veníamos cenados y era muy tarde, pero sí disfrutamos muchísimo de su terraza intentando mitigar los estragos del sofocante calor que nos hizo. La verdad es que al estar tan cerca de nuestro alejamiento pensé que volvería cada noche, pero lamentablemente no fue el caso. Por el lado positivo ya os avanzo que pude visitar otras cervecerías de la ciudad. Estad atentos. De momento les colocamos su correspondiente pin en nuestro cada vez más extenso Mapa Birruno. Ci vediamo!

Balance de daños:

-Schigibier - Karasciò. Buen momento para descubrir a este birrificio de Lombardía. Una Belgian Blonde muy suave, ligera de trago, no especialmente belgiany, pero con el lúpulo bastante marcado debido a un dry hopping de lúpulo Centennial. Muy herbácea, muy afrutada, muy refrescante, con el punto de lúpulo más que notable. Final bastante amargo y un poquito seco. 4,7%.

-Shire - Selassié. Colosal English Coffee Porter de este birrificio que aún no conocía de la región del Lazio. Elaborada con malta Maris Otter, Brown, Pale, Chocolate, avena y avena tostada, lúpulo Challenger y levadura inglesa. En boca esespecialmente sedosa, muy cremosa, con un sabor increíble a café y notas de chocolate. Me pareció riquísima. 5,4%.


Beer Time            Piazza dei Quiriti 9, Roma (Italia)            +39   06  4565  0686

21 de julio de 2025

Hoppy Road - Balnibarbi

Y con la cerveza de hoy acaba mi particular Tour de France 2025, que, para lo poco que duró, ha sido muy edificante y ha dado como para hacerme una buena idea de lo que se está cociendo en el país cocino: algo acojonante.

Saltan pues a la palestra Hoppy Road, que seguramente os suenen, ya que han llegado a España en numerosas ocasiones. Cabe decir que si no habían aparecido antes por aquí es porque lo que llega a nuestras tiendas únicamente son sus New England IPAs -qué cosa más rara- aunque a mí me constaba que tenían un buen arsenalete de cervezas de fermentación espontánea, que eran las que me interesaban. Sabiendo de antemano que nunca iban a llegar a mi país, me fui al suyo a buscarlas.

Hoppy Road tiene su sede en Maxéville, una pequeña villa limítrofe con Nancy, al norte del país. Empezaron a fermentar allá por 2017, y se definen como una cervecera libre, independiente y siempre en continua exploración, por lo que van a abarcar una gran diversidad de estilos. Quizás se les conozca por sus cervezas más lupuladas, pero también tocan estilos como Grape Ales, Imperial Stouts, Pastry Goses, Saisons de fermentación mixta, Fruited Sours, Pilsners y un largo etcétera. Mi objetivo era dar con alguna de sus Saisons, pero al final tuve que "conformarme" con una de las dos referencias con las que contaban en Kaspar & Lupulin, que fue donde compré la botella.

La joyita se llama Balnibarbi. Se trata de una Wild Ale elaborada con malta de cebada, malta de centeno y copos de avena, lúpulo Hallertau Blanc y la adición de lías de uva de las variedades Gamay y Pinot Noir. Fermentada con las levaduras salvajes locales.

La sirvo en copa TeKu. Presenta un precioso color rosado límpido, con tendencias cobrizas, sin ninguna turbidez ni partícula en suspensión. Tiene una buena carbonatación, da para una gruesa corona de espuma blanca, bastante compacta, aunque de muy poca duración En nariz su aroma nos avisa de que la cosa viene acidita.

En boca es absolutamente deliciosa. De cuerpo bajo, resulta altamente bebestible, pero ojito porque cuenta con bastante complejidad. Acidez suave, muy sutil, nada incisiva, que resulta altamente refrescante. El sabor a uva es muy rico, y me recuerda a un vino rosado, aunque hay notas afrutadas increíbles, que me recuerdan a la grosella, la frambuesa, el lichi, la papaya y el higo chumbo. Final sequito, una auténtica maravilla. Esta gente la toca. 4,8%. Me costó 16,00€. Botella de 75cl.

18 de julio de 2025

Assau - Flying Gloom

Acabé comprando por error esta Oatmeal Stout de la brasserie Aussau. El casa es que no quería repetir cerveceras para abarcar el máximo de brasseries posibles y precisamente la fui a cagar con una de las que menos me gustó. Su Saison no me quitó el sueño y, en este caso, debo admitir que la de hoy no me ha gustado nada.

La criaturica se llama Flying Gloom y está elaborada con malta Pilsen, Brown, Black, malta Chocolate y malta de avena. El lúpulo empleado es el Sabro. A priori los sabores a chocolate de las maltas combinados con el perfil de coco del Sabro deberían casar a la perfección, pero no ha sido así.

La sirvo en una copa que se asemeja a un snifter. Presenta un color marrón oscuro (nada negro) poco apetecible y que poco tiene que ver con el estilo. La carbonatación está bastante ida de madre. Espuma muy abundante, compacta, aunque con algunos huecos, de color beis. Persistencia media. Viene con bastante poso.

En nariz es bastante tostada, con alguna nota también de chocolate. No encuentro el Sabro en aroma. En boca no resulta nada sedosa pese a que lleva avena, es más el cuerpo resulta bastante ligero para el estilo que estamos tratando. Tiene un sabor a torrefacto demasiado subido para mi gusto, aunque afortunadamente cuenta con un regustillo a chocolate con leche bastante agradable. En boca tampoco encuentro el Sabro, cosa que me da bastante bajón. Para acabarlo de rematar hay un gusto metálico que chirría entre todo lo anteriormente comentado. En general bastante chusca y fuera de estilo. Me costó 3,10€. Botella de 33cl.

17 de julio de 2025

Alchemistes Ivres - Ambrelune

En el interior del festival Echos & Merveilles habían muchos tenderetes de artesanías: quesos, frutos secos garrapiñados, pulseras, un largo etcétera y por supuesto cerveza.

La única cervecera con stand propio era la de los bretones Alchemistes Ivres, con fábrica en Broons. No es que sean precisamente occitanos, pero la afición por los juegos de rol y el mundo fantástico entra en total sintonía con el evento. Tocan todos los palos, aunque tienen predilección por los estilos tostados.

Del catálogo disponible -como no tenían ninguna Saison- me fui a por esta Amber Ale, de nombre Ambrelune, elaborada con malta con malta de cebada, malta de trigo, levadura y lúpulo Fuggles.

La sirvo en vaso nonic. Como veo que la espuma no va a rebasar el borde escancio a tope con el objetivo de sacar el máximo de espuma posible. Aparece una generosa corona de espuma bastante compacta, de color hueso y de persistencia media.

En nariz se pueden apreciar notas tostadas y cafetosas. En boca resulta un tanto dulzona, con notas de caramelo y también algo de galleta. Predominan bastante las notas tostadas, con un saborcillo a café bastante subidito para el estilo que estamos tratando. Se echa de menos que aparezca el lúpulo para aportar un poco de gracia al asunto. Final no especialmente amargo (20 IBU). 6,0%. Me costó 3,50€. Botella de 33cl.

16 de julio de 2025

Le Gué des Moines - La Belle Nº20 Barrel Aged

Y la cerveza adquirida en el taproom de Le Gué des Moines fue La Belle 20 Barrel Aged, una Imperial Stout elaborada con malta de cebada, malta de avena y envejecida durante 24 meses en barrica de güisqui Maison Victor, que antes había contenido Sherry.

La sirvo en copa TeKu. Presenta un color totalmente negro y una caída bastante oleosa. Bastante carbonatada, con una buena corona de espuma compacta y persistente de color blanco roto.

En nariz me vienen aromas a higos secos, pasas, café y regaliz. En boca es una cerveza con cuerpo, bastante sedosa. Resulta bastante alcohólica pese a que "solo" tiene 7,5%. Sensación de cubatazo a cada sorbo, no obstante la experiencia es bastante placentera y la cerveza rica. Sabores tostados, de café, bastante regaliz y ese puntito de pasas e higos secos que me recuerda de soslayo a las Quadrupels belgas. El güisquito bastante presente, aunque sin restarle protagonismo al resto de matices. Bastante disfrutable. Final amarguete (25 IBU). Me costó 4,80€. Botella de 33cl.

15 de julio de 2025

Le Gué des Moines - Bruguières

 

Al tercer día de nuestra invasión en las Galias, al marido de mi prima se le ocurrió la idea de asistir al festival medievofantástico Echos & Merveilles, que se realiza cada año en la localidad de Bruguières -a media hora de Toulouse- y que tiene un enorme éxito en la región, con una grandísima afluencia de público.

Para allá que nos fuimos. Pasamos una mañana entretenida entre peña disfrazada, conciertos folky (y otras cosas raras), lanzamientos de hacha, tiro con arco, tenderetes de artesanías, food trucks y sí, también habían grifos de craft beer. Joder, y es que si estás apostando por la artesanía local, qué menos que hacer lo propio con la bebida. Allá en Francia lo tienen muy claro. Aquí en España tenemos mucho que aprender. La única cervecera disponible en el festival era La Berlue, de la que ya os hablé hace unas semanas. Durante la jornada pude probar cuatro de sus variedades, pero lo mejor se encontraba a la salida. Justo a la salida del recinto del Echos & Merveilles fui a dar de bruces con la fábrica de Le Gué des Moines, así que no tuve más remedio que meterme dentro a refrescarme. Ya que aunque solo era principios de mayo, hacía muchísimo calor.


La historia de La Gué des Moines se remonta a 2015, cuando Martial Paille -tras varios años como homebrewer elaborando cerveza casera en la cocina de su casa- decide dejar su trabajo en logística para dedicarse profesionalmente a la cerveza. Se forma en el IFBM (Institut Français des Boissons, de la Brasserie et de la Malterie) en Nancy. Realiza sus prácticas en la brasserie Saint Germain y en 2016 funda La Gué des Moines junto a su socia Sophie Freyburger.

Su catálogo es bastante extenso. Cuentan con numerosas Blonde Ales, Witbiers y alguna Ambrée de corte belga. Aunque no son como la mayoría de cerveceras artesanales que basan el 95% de su producción en IPAs también cuentan con bastantes India Pale Ales (y alguna que otra NEIPA). También cuentan con algunas Fruited Sours, pero donde hay que poner especial atención es en su catálogo de Imperial Stouts envejecidas en barricas de güisqui.

La fábrica cuenta con tres maceradores, seis fermentadores, una embotelladora y un almacén donde también tienen varias barricas para envejecer cervezas. Está abierta al público para la degustación, contando con tres espacios: En el exterior de la nave disponen de una extensa terraza, con una gran cantidad de barriles, mesas pequeñas y kegs a modo de taburetes. Aunque cuentan con varias sombrillas, también han habilitado un porche con una sombrita muy maja donde tienen cuatro mesas más amplias de estilo biergarten.

En el interior de la fábrica, justo al lado de la sala de máquinas, cuentan con otra espaciosa sala (que es la que podéis apreciar en la segunda fotografía). Donde disponen de numerosos barriles que funcionan a modo de mesa, mesas altas y taburetes. En esta sala es donde se ubica un pequeño escenario, para las fiestas, conciertos y eventos múltiples que se organizan en la cervecería.

También en el interior de la fábrica, hay otra sala -un poco más pequeña- pero con decoración más agradable, más cálida y de estilo de cervecería, que hace que te olvides que estás en una nave industrial. En esta última hay varias mesas altas y taburetes, aire acondicionado, proyector en pantalla gigantesca para ver los deportes, una barra con once grifos, una pequeña cocina e incluso un pequeño rincón donde se pueden comprar sus cervezas y vinos de la zona.

El factor aire acondicionado fue determinante para nuestra elección, que por unanimidad fue ésta última. Tras haberme chuflado varias birras durante el festival medievofantástico, decidí tan solo consumir una IPA, ya se me había bajado la toña pero convenía no volver a incrementar los niveles de alcohol en sangre. Pasamos un rato muy a gusto -y fresquitos- viendo el rugby. La chica que nos atendió muy maja, y además pude comprar una Imperial Stout envejecida en barrica para llevarme a casa. Qué más quieres, Baldomero. Una sorpresa muy agradable a la par que inesperada, así que no dudé en aprovechar la ocasión. Finalizo colocando su correspondiente pin en nuestro extensísimo Mapa Birruno.

Balance de daños:

-La Gué des Moines - Roi de Coeur. La única birra que cayó durante la visita (que no durante el día) fue esta fantástica West Coast IPA de color dorado y aspecto límpido. Hacía muchísimo calor y era lo que me pedía el cuerpo.

Aromas herbáceos y cítricos muy agradables. Sabor intenso, que recuerda a las agujas de pino y la corteza de cítricos y un amargor considerable al final (57 IBU). Tiene un cuerpo potentillo pero en general es muy refrescante y se bebe bien. 7,3%












La Gué des Moines            Rue de la Briqueterie 31, Bruguières (Francia)            www.laguedesmoines.fr                +33   09  67  48   99  63

12 de julio de 2025

SPO - Saison Bruxellensis

También en mi lista, de forma ineludible, iba apuntada la Brasserie SPO.

Ubicados en Griesbach-Au-Val -localidad francesa muy cercana a Basilea y la frontera con Suiza- se especializan en cervezas de fermentación espontánea envejecidas en barrica de vino o licores.

Del los ejemplares disponibles en Kaspar & Lupulin elegí Saison Bruxellensis, una cerveza Farmhouse elaborada con malta de cebada, trigo, lúpulos (no especifica de qué variedades) y una fermentación mixta. Ha sido envejecida durante 8 meses en barrica de güisqui.

Procedo a descorcharla y servirla en copa TeKu. Presenta un color dorado muy claro, bastante transparente, sin turbideces ni partículas en suspensión. La carbonatación es bastante abundante, da para una gruesa corona de espuma compacta, de color blanco, de considerable persistencia.

En nariz es bastante compleja. Me vienen notas que me recuerdan a la manzana, la uva, la sidra e incluso el cava. También un tufillo que los expertos denominan "manta de caballo". En boca es extraordinaria. No es especialmente ácida, la acidez es muy sutil, muy suave. Es una cerveza de cuerpo medio tirando a la baja, muy refrescante, con burbuja finita que produce una sensación picante durante toda la cata y que me recuerda mucho al cava. Notas de manzana fresca, de sidra e incluso uva. Puntito de madera riquísimo, final seco. Pero lo mejor es el puntito del güisqui, muy suave, muy sutil, muy fino, que lejos de ser convertir la cerveza en un cubatazo le da un rollazo brutal de esos que hacen que te vuele la cabeza. En general me ha parecido deliciosa, muy fina y muy armoniosa en todos los aspectos. Nada chirría, nada está ido de madre, todo encaja y todo está rico. Muy sabrosa y sin ninguna estridencia. Un trabajo colosal. Chapeau! 5,9%. Me costó 24,00€. Botella de 75cl.

3 de julio de 2025

Flore - Ensemble #2: Resolution

Otra de las brasseries que llevaba en mi lista previa a mi visita a Kaspar & Lupulin era Flore.

La Brasserie Flore, ubicada en Fontaine (localidad limítrofe a Grenoble). Su andadura comienza en 2020 y se focalizan en cervezas de fermentaciones mixtas y maduración en barrica.

Del repertorio que tenían en Kaspar & Lupulin, el tendero me recomendó Ensamblage #2: Resolution. Se trata de una cerveza Sour fruto de un blend de cervezas rústicas y posteriormente añejada en barrica de vino tinto de Côtes du Rhône. Lleva una fermentación mixta de levadura belga y un cultivo de varias cepas de diferentes cerveceras italianas. La receta lleva maltas de cebada, trigo y centeno; lúpulo y azúcar para la refermentación.

La sirvo en copa TeKu. Presenta un color dorado bastante límpido. La carbonatación no es muy abundante, pero aún así da para formar una gruesa corona de espuma de color blanco que no tarda en desaparecer por completo. La retención del carbónico es baja.

En nariz nos da todos esos aromas que nos suscitan "rusticidad" y salvajismo, así como notas de fruta (manzanas y peras) y algún cítrico (básicamente limón). En boca es una cerveza sabrosa y muy compleja. Contamos con la acidez, que es bastante notable pero sin que resulte agresiva. Más bien es una acidez que a mí personalmente me ha recordado al limón, y que por lo tanto te la tomarías como un agua de limón. Es una cerveza agradable, pero no para bebérsela de un solo trago. Hay que disfrutarla con calma. Además del limón, se puede disfrutar de matices que recuerdan al membrillo, la manzana ácida y las peras. Al principio recuerda mucho a la sidra, pero más adelante aflora un sabor a vino blanco excepcional, e incluso notas de vino añejo. Madera, rusticidad, ese toquecito de establo... me ha recordado bastante a las Gueuzes de Cantillon, pero más fina y sin irse tanto de madre como algunas Lambic. Puntito terrosito suave y la sequedad finalque no falte. Joder, para una cervecera que tiene solo 5 años me parece que aquí hay muchísimo talento. 6,0%. Me costó 14,00€. Botella de 75cl.