29 de julio de 2019

Lo Vilot - Verema Garnatxa

El otro día, aprovechando una breve pasada por Granollers -yo aprovecho cualquier ocasión para una escapada birruna- aprovechando que encontré aparcamiento milagrosamente muy cerca del Rauxa -un auténtico milagro, para los que no conozcáis la ciudad- así que decidí acercarme y echarme la birrita de turno para sofocar el calor, que está pegando de lo lindo, añado.

Tienen una nevera con una variedad brutal, pero de entre todas las birras que había decidí darle una oportunidad a ésta de la cervecera de ponent Lo Vilot. La razón es que he leído cosas muy buenas de la cervecera de Almacelles (Lleida). Yo no puedo afirmar lo mismo, la verdad es que siendo honesto, tanto su IPA como su Scottish Heavy no me gustaron nada (también aclaro que hace tres años que no compro nada a los tenderos que me las vendieron, mucha birra chusca me he comido allí). El punto de inflexión vino cuando aparecieron en el programa de TV3 "30 minuts" y pude ver que es el tipo de cervecera que suelo alabar, ya que además de elaborar cervezas cultivan la materia prima. Así que decidí darles otra oportunidad y no descarto hacerles una visita más pronto que tarde.

Al lío. La cerveza se llama Verema (Vendimia), que han elaborado en colaboración con los viticultores La Gravera. De esta cerveza se han elaborado dos versiones: una con uva Monastrell y otra con la variedad de uva Garnatxa, que es de la que nos ocupamos hoy. De estilo Italian Grape Ale, color rojizo y escasa gasificación (la fotografía pide a gritos que me hubieran pasado la copa por el lavavasos antes del servicio). Esta cerveza, además de contener el mosto de la uva tiene el mérito de llevar una fermentación espontánea, por la que la dificultad es doble. Cuando añades fruta a una cerveza la fermentación se te puede ir de madre, y si encima es espontánea ya ni os cuento. Además los ingredientes son locales y ecológicos ¡bravo!

De sabor ácido, prima el punto Sour por encima de todo, aunque se deja aparecer un pequeño punto dulzón de la uva. Claramente la balanza se decanta por el lado ácido, pero sin que nos llegue a poner la cara como la del Fary. Me ha resultado agradable y ligera de trago. Final nada amargo. Sin llegar a la altura de Loverbeer me ha parecido una cerveza rica y con muchísimo mérito. Felicito al equipo y reconozco su valentía. 5,5%.

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