No soy muy nada de Pastry Sours, pero sí soy muy fan de los cerveceros cántabros de La Grúa, así que cuando me topé con ella no me la quise perder. También era una manera de probar estilos que no son de mi agrado para curtirme en materia.
Los de Pontejos nos presentan Cream Dream, que intenta recrear el pastel de queso con cobertura de arándanos, y para ello han utilizado en su receta malta de cebada, trigo, frambuesas, arándanos, lactosa y vainilla.
La sirvo en vaso shaker y presenta un color rojizo muy intenso. La carbonatación no es muy abundante, pero nos deja una capa suficiente de espuma blanca con un toquecito rosáceo. La cerveza rápidamente pierde el carbónico.
Le doy el primer tiento, resultándome bastante ácida, aunque rápidamente la acidez queda equilibrada por el potente dulzor. La lactosa y la vainilla nos dejan ese fondo dulce y cremoso que nos recuerda al cheese cake, el trigo aporta ese cuerpo y ese fondo de cereal que nos recuerda a la base de dicha tarta, y las frambuesas y los arándanos nos dan todo el sabor de la cobertura, con un saborazo brutal, muy rico. Está todo ahí, no hace falta de nada. Vuelvo a insistir que no soy muy fan de este tipo de cervezas pero debo admitir que la cerveza está muy bien hecha y que sabe a lo que tiene que saber. Aún así me la bebí con mucho gusto y no me duró demasiado. 6,0%.
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