Seguimos dándole al bebercio a base de cerveza Weizen, esta vez catando el producto nacional, de la mano de los cerveceros riojanos de Mateo & Bernabé and Friends.
Tengo que reconocer que soy un gran entusiasta de esta cervecera de Logroño, y qué decir que no hay nada mejor que darle a la birra y las tapitas por la Calle Laurel, pero para ser honesto, creo que ésta es su cerveza más floja. He probado sus cuatro cervezas principales -me faltan aún por probar su A Gorila y su B Cangrejo- y en mi opinión ésta es la que menos me ha gustado, y mira que me apasionan las cervezas Weizen.
De carbonatación muy abundante -a la vista está- espuma muy tupida y color dorado, lo primero que nos asalta al olfato es un intenso olor a cítricos, sigo esnifando espuma cual Maradona en versión birruna y consigo percibir un tenue olor a plátano. Pasamos a mi parte favorita: beer introduction. Directa al paladar.
Lo primero que sigue apareciendo es ese fuerte sabor a cítricos, que aporta un toque refrescante a la cerveza, pero que le mata todo el sabor a trigo y a pan, que en mi opinión debería ser muchísimo más intenso para el estilo que estamos tratando. Una pena porque en mi opinión ese punto ácido se carga la cerveza. No sé si sería esa la intención del maestro cervecero o el lote era defectuoso, pero a mí personalmente no me gustan las cervezas Weizen tan ácidas, las prefiero más sedosas y con toda la carga de malta -de cebada y trigo- bien presente, y si de paso le damos un toque con naranja y cilantro perfecto, pero para mí es importantísima la presencia del cereal, lo mismo opino con las cervezas India Pale Ale, lo he dicho varias veces en muchísimas reseñas. En cualquier caso, yo sigo confiando en esta gente y seguiré probando todas las novedades que vayan sacando. La 21 Mateo tiene una graduación de 5,0%.
Para mí Mateo & Bernabé representan todo lo que no me gusta de la cerveza nacional: calidad mediocre, precios infladísimos y pretensiones de producto de lujo. Evidentemente todo es cuestión de gustos, pero a mí no me motivan nada nada.
ResponderEliminarYo tengo un par en el trastero para probar. A ver que tal
ResponderEliminarJuas juas juas. Directo al grano como Clearasil. A ver, que los Mateo & Bernabé and Friends se pasan con los precios para la calidad que tiene su cerveza es cierto, en eso estoy de acuerdo. Sólo hay que comparar la 21 Mateo con la Weihenstephaner que reseñé antes de ayer. Es indiscutible. E incluso añado: prefiero pagar los entre 7-10 euros que me pueda costar la Rogue Mum's Hefeweizen antes que la de los riojanos, pero de ahí a afirmar que son de una calidad mediocre tampoco me parece justo. En España se está empezando a hacer muy buena cerveza y también mucha gente que hace muy mala birra que se está intentando subir al carro. Tranquilos, el tiempo los pondrá a todos en su lugar.
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