31 de octubre de 2022

Dougall's - Dúo2 HBC 586 Cryo Pop

Hace unas semanas tuvimos invitados en casa para cenar, y como conocen mi filia por el sagrado líquido dorado, me trajeron algunas cervezas de obsequio, cosa que agradecí enormemente.

Como meteorológicamente seguimos en verano, me apeteció empezar con una refrescante IPA, así que me abrí la Dougall's. se trata de una India Pale Ale de su serie de India Pale Ales bivarietales de lúpulo. De esta serie llevan ya un par, y la que me regalaron fue la que lleva el lúpulo experimental HBC 586 y el variadito Cryo Pop, que ya hemos podido catar en algunas otras IPAs de otras marcas. La carga maltosa lleva Extra Pale, Maris Otter, Cara-Gold y copos de avena.

La sirvo en vaso shaker, presentando un bonito color, entre dorado y amarillento (10 EBC). No es demasiado hazy, pero si viene cargada con muchísimas partículas en suspensión. La carbonatación es bastante abundante y nos dejaría una copiosa capa espuma, sin llegar a resultar compacta del todo, blanca y persistente.

Asomo la napia para aspirar el agradable aroma a melocotones que desprende. Mucha fruta de hueso por aquí. Procedo al primer tiento. Resulta refrescante y muy bebestible. En boca podemos disfrutar de sabores cítricos y herbáceos muy agradables, con un final muy amargo (55 IBU). 6,3%.

30 de octubre de 2022

Cerex - 5

Esos regalos birrunos que ya no se estilan. Estamos perdiendo las buenas costumbres. La cerveza de hoy la compró una compañera de trabajo durante sus vacaciones estivales, me la pimplé en su día, pero quedó la reseña pendiente. Pues nada, va a tu salud Silvita.

Primera toma de contacto con la cervecera extremeña Cerex, que para ser honesto, había oído de todo acerca de ellos. La verdad es que el sello de mejor cerveza de España 2015 me tira mucho para atrás, aunque seguramente causará el efecto contrario entre la clientela de El Corte Inglés, que es donde suele venderse.

La sirvo en copa TeKu, y presenta un color dorado subido, un poquito más intenso, y el aspecto es totalmente límpido. La carbonatación es muy abundante, y genera una copiosa capa de espuma blanca, muy compacta y muy persistente.

En nariz me ha llegado un aroma floral muy agradable y totalmente inesperado. En boca es una cerveza muy ligera, muy crispy y bebestible. Predomina el sabor del cereal, que viene acompañado del puntito floral, que también aparece en el sabor. amargor final suavecito (12 IBU), oye chico, pues ni tan mal. La verdad es que la experiencia ha sido placentera. Muchas gracias Silvia. 5,0%.

29 de octubre de 2022

Spencer - Monk's Reserve Ale

Y con mucha penita y mucho dolor nos vamos a fundir la última botella de la tristemente desaparecida Spencer, única cervecera trapense fuera de continente europeo. Así que damos por supuesto que ésta tiene todos los números para que sea la última cerveza que nos bebemos de ellos.

Nos habíamos dejado para el final su Monk's Reserve Ale, una Quadrupel de 10,2% para acabar más tajaos que el greñas de Locomía. Vamos allá.

La sirvo en copa TeKu. Presenta color pardo, con algún destello rojizo al trasluz. La espuma es muy abundante, muy compacta, muy persistente y cremosa, y de color beis. Al asomar la napia podemos disfrutar de los aromas a ciruelas pasas, higos secos y uvas pasas. También el puntito belgian, que no falte.

En boca es una cerveza intensa, potente. Es un pelín alcohólica, pero sin resultar durita, con cuerpo, para disfrutarla con la calmeta. Sabor tostado, maltoso, con notas dulces, acarameladas y de toffee. Nos vienen en sabor todas las frutas que hemos percibido en aroma: uvas y ciruelas pasas, higos secos... la levadura belga impone un marcado carácter, notas especiadas... una joyita. Me costó 4,29€. Botella de 33cl. Espero que la abadía de Saint Joseph reprenda su actividad birruna de nuevo, me daría mucha pena que desapareciese para siempre.

28 de octubre de 2022

Protokoll - Sports

Han empezado a llegar a nuestras tiendas cerveceras las primeras latitas de Protokoll, un brewpub de Berlín que ha empezado a exportar sus cervezas en este formato. Por lo que pude ver, todo lupulado.

Particularmente , cada vez compro menos IPAs, pero se juntó que aquel día en la tienda no habían demasiadas referencias y la curiosidad por esta desconocida cervecera, así que estuve echándole un ojo a las latas para seleccionar alguna para llevar a casa.

De las 7 u 8 disponibles que había, todo NEIPAs y NEDIPAs y una West Coast IPA. Finalmente la que se vino a casa fue Sports, una New England Double India Pale Ale elaborada con maltas de cebada, trigo y avena y los lúpulos Sabro, Citra y Cashmere. Fue de agradecer la gran cantidad de información que viene en las latas, factor que indudablemente facilitó mi compra.

La sirvo en una copa que se asemeja a la del logo de la marca, presentando un bonito color amelocotonado, con la turbidez característica del estilo. Sube la cosita con alegría cuanto a carbonatación se refiere. Espuma abundante y compacta, con aspecto de nata montada, totalmente blanca y bastante persistente. En nariz predomina el aroma a piña colada. En boca sigue la cosa en la misma dirección, con un sabor a piña bastante notable, que viene acompañado de coco, mango y cítricos. Es una cerveza corpulenta, bastante sedosa y no demasiado amarga pese a sus 40 IBU. 8,0%. Comprada refrigerada en la General de Begudes de Valldoreix por 4,76€. Lata de 44cl.

24 de octubre de 2022

CR/AK - Giant Step

¡Ups! pues se nos había quedado un pelín atrasada la publicación de la cerveza de hoy, que me bebí allá por aquel lejano 7 de agosto en nuestra última visita a la bocatería La Gàbia de Benicàssim. El bocata de lomo con pimientos fue imperativo maridaje.

Creo que ya he escrito en el blog de manera reiterada mi indignación ante la falta de referencias italianas en nuestras tiendas de confianza. Me cuesta la vida dar con referencias de CR/AK, incluso con cervezas de su catálogo regular, como la Giant Step, así que cuando se cruzan en mi camino no hay piedad. Caen sí o sí. Se están haciendo de rogar, pero poquito a poquito vamos finiquitando su gama base.

La de hoy es una IPA clasicorra, que los de Campodarsego contaban en su haber antes de que se desatase toda la locura de las New England IPAs. De esta cerveza se han realizado varias versiones (que nunca caté) y si ya me ha costado dar con la prístina, ya puedo ir olvidándome de las tuneadas. Una cosa que me ha llamado la atención es que -al igual que con la Focal Banger de The Alchemist- sus creadores recomiendan beberla directamente de la lata, recomendación que -como podéis observar en la instantánea- me he pasado directamente por el forro, que uno no se estudia el puto temario del Cicerone para acabar chupando aluminio.

La sirvo en el vaso de la marca, que amablemente me facilita uno de los amables camareros de La Gàbia. Presenta un color entre dorado y ambarino, un tanto velada, pero sin llegar a hazy, muy alejada de sus primas de Vermont. Asomo la tocha y me llega un aroma a fruta tropical muy agradable, donde predomina el mango. En boca es una cerveza potente, muy sabrosa y con cuerpecito, aunque pasa muy bien -máxime con ese lomo con pimientos- y te la fundes con alegría y entusiasmo. Predominan los sabores cítricos (pomelo y naranja) que resultan muy refrescantes, y cuenta también con una buena dosis de resina, que aporta una sensación balsámica y agradable. Final muy amargo, como cabía esperar. Qué gustazo Dios mío. 5,50€. Lata de 40cl. ¿Por qué cojones CR/AK no hace latas de 44cl?

23 de octubre de 2022

Mikkeller - Sally! O Sally!

Y entre las millones de elaboraciones distintas de Mikkeller, creo que mi cerebro empezó a hacer una sana criba, para descartar el 99% de su producción, que a día de hoy me la trae al pairo, y centrarme en ese 1% de cosas que por un motivo u otro llegan a llamar mi atención.

Una de esas elaboraciones que se vino para casita fue la lata de medio litraco de Sally! O Sally! una cerveza Kölsch auténtica. Maticemos. Kölsch es un estilo de cerveza de alta fermentación protegido por una denominación de origen. En no pocas ocasiones he visto cervezas elaboradas en España con la palabra Kölsch bien grande, con dos cojones. Bien ¿y cómo se la han arreglado unos daneses para realizar una Kölsch auténtica? Pues sencillo, al igual que hicieron en su día para embotellar cervezas bajo el nombre de Lambic, en esta ocasión se han ido hasta la ciudad de Colonia para realizar una cerveza del citado estilo en las instalaciones de Gaffel. Me queda la duda si han cogido la Gaffel ordinaria y directamente la han enlatado como Mikkeller o si al menos han tenido la decencia de currarse una receta propia.

Pues nada, al lío. A falta de vasos del estilo la sirvo en uno que más o menos podría asemejarse. Cuando consiga tirar todos los vasos de ferias cerveceras que tengo al contenedor verde y haga hueco para cristalería útil quizás me compre uno para birras de este estilo. Presenta un límpido color dorado, sin impurezas. La carbonatación es bastante abundante y considerablemente persistente, aunque la instantánea indique todo lo contrario. En nariz podemos disfrutar de tenues notas afrutadas y del aroma a malta de cebada. En boca es una cerveza muy ligera, de trago fácil, muy crispy y con el sabor de la malta como protagonista. Tiene alguna notita suave afrutada y un final amargo bastante notable, aunque nada excesivo. Comprada refrigerada en la General de Begudes de Valldoreix. Lata de 50cl. No recuerdo lo que me costó.

20 de octubre de 2022

Birrificio Italiano - Finisterræ

Pues seguramente estaréis pensando que después de casi nueve años reseñando cervezas en el blog debo estar ya hasta la polla de todo y a estas alturas ya no debe haber nada que me sorprenda. Nada más lejos de la realidad.

Llega una de mis cerveceras fetiche - Birrificio Italiano y te saca Finisterræ para dejarte así, con el ojete tuerto. Advierto a futuros consumidores que conviene informarse al respecto (ya sea en este maravilloso blog, web de la cervecera u otras páginas) antes de soltar gilipolleces o ponerse a puntuar por debajo del 3,5 como he visto a algún mastuerzo en Untappd.

Empecemos aclarando que en dicha aplicación -a falta de estilos híbridos- la clasifican Weizen y se quedan tan anchos. Claro, si nos la vamos a tomar pensando en una cerveza Weizen alemana en el sentido más ultraortodoxo, seguramente nos parecerá un mojonazo. No vamos bien. Sus creadores la califican como una Italian White, que nos arroja poca información de lo que nos vamos a beber, y por ende, vamos a consultar en Untappd y la vamos a cagar. Por ese motivo hay que informarse previamente, ya que la cerveza en cuestión es un perfecto híbrido entre una Weizen alemana y una Saison belga, cosa que haría que un teutón se llevase las manos a la cabeza por considerarla una receta espuria, pero que haría las delicias del flamenco de turno, considerablemente muchísimo más abierto de miras en este aspecto.

Finisterræ se ha elaborado con malta de trigo y de cebada y además lleva una fermentación mixta. Dejémonos de preámbulos y vayamos a descubrir qué tal ha quedado el invento. Me debato entre servirla en un vaso alto para Weizens o en una TeKu. Finalmente opto por lo segundo. Presenta un bonito color pálido, con bastante turbidez, que nos recuerda a las Weizen germanas. La carbonatación es muy abundante y podemos generar una gruesa capa de espuma compacta, cremosa y muy persistente de color blanco.

En nariz destaca el carácter Saison. Mucha levadura, inclinándose hacia el lado fenólico. En boca la cosa nos rompe la olla al primer sorbo. El primer trago es de puro plátano, con una tendencia clarísima hacia la Weizen. Resulta sedosa y con considerable cuerpo, aunque se bebe con alegría. Está muy rica. La cosa continua bastante platanil, pero a medida que se va calentando van apareciendo sabores especiados, para luego venir una carga afrutada -de peras y manzanas- que nos va sacando en boca una cara un tanto más belga. Se produce en el paladar un insólito desfile de frutas, donde peras, manzanas y bananas juegan harmoniosamente sin que nada chirríe. Combina todo a la perfección. Final notablemente amargo, un pelín sequito también. En ningún momento se nos hace rara, parece todo tan natural y tan lógico, como si hubiese existido ese estilo toda la vida. Una maravilla. Tan solo me queda felicitar a Agostino Arioli. 5,0%. Comprada refrigerada en el Bar Bocamoll por 5,60€ (precio de restaurante). Botella de 33cl.

18 de octubre de 2022

FiftyFifty - Eclipse Salted Caramel

Pues nada, ya que el lunes había comenzado con alegría, el martes no iba a ser menos.

Se hizo de rogar, me la regaló mi suegra por mi santo en diciembre del año pasado y ha estado en la despensilla criando telarañas tan ricamente. Por fin encontramos el momento perfecto para abrirla, aprovechando la visita de unos amigos para cenar. Una de las grandes cerveceras norteamericanas a las que tenía ganas de tachar de mi lista personal: FiftyFifty.

Y no la hemos tachado de la lista precisamente con cualquier mierda de su catálogo, no. Nos hemos ido directamente a por su buque insignia: Eclipse. De su impecable Imperial Stout existen numerosísimas versiones, y de todas las que tenían disponibles, mi querida Socorrito fue a elegir la Salted Caramel, elaborada en 2019, con la adición de caramelo salado y envejecida durante un mínimo de 6 meses en barrica de bourbon. Cómo me conoce Maria Socors.

Pues nada, vete a por dos copas que la peña quiere postre. Previo al deschape procedo a retirar la cera que cubre el cuello de la botella, puramente ornamental. Me cago en todo el estado de California y parte de Nevada al comprobar que la chapa viene sin dibujo. La sirvo en la copa de Spiegelau para cervezas barrel aged, el resto lo sirvo en una parecida a una copa snifter, con la gracia y salero que me caracterizan al escanciar petróleos. No hay nada que me de más rabia que una Stout sin una buena dosis de cremosa espuma. Cae grácilmente mostrando un aspecto oleoso, color azabache y una opacidad total. La carbonatación es muy abundante y logro sacarle una copiosa capa de espuma compacta, cremosísima y persistente de color beis. Procedo a acercar la tocha cual AVE a la estación de Atocha.

En nariz destaca el intenso aroma a chocolate. Parece como si el puto Willy Wonka estuviese dentro. En boca es una cerveza con muchísimo cuerpo, así que vamos a tomárnosla con muchísima calma. El alcohol está demasiado bien integrado (11,0%) y carece de esa sensación licorosa que nos calienta la garganta. Destaca el sabor a chocolate negro. Mucho caramelo, muy evidente pero sin resultar empachoso en ningún momento, en su justa medida. El punto salino, más que parecer una ahogadilla en la Malvarrosa lo que hace es realzar el sabor del café y del chocolate, que son de absoluta locura. Nos asalta la duda del tongo al no aparecer el bourbon, pero, ¡Ay, hombres de poca fe! A la que se calienta el asunto la cosa cambia considerablemente, menguando el sabor a pastelería y incrementándose el rollo licoreta. El sabor a bourbon acaba siendo más que evidente, sin llegar al cubatazo. Aquí hay mucha mano y buen hacer por parte del maestro cervecero. Un trabajo muy fino, y sin duda una de las mejores Imperial Pastry Stouts que he probado nunca. Chapeau nanos. La maridamos con un brazo de gitano de chocolate que trajeron mis invitados y casó divina, pero sola la cosa hubiera funcionado fetén de todos modos. Botellaza de 50cl.

17 de octubre de 2022

Monkish - Socrates' Philoshophies & Hypotheses

Volvemos al tajo con un birrote tremendísimo. Cuarta lata que me crují de la cervecera de Torrance, una New England Triple IPA que a priori (por graduación) no parecía que fuese a ser la mejor del pack de 6 Monkish que me trinqué en verano, pero, ¡Ay amigo! sin duda ha sido la mejor de lejos.

La joyaza se llama Socrates' Philoshophies & Hypotheses y viene cargadita de lúpulos Mosaic, Citra y Galaxy. vamos allá.

La sirvo en copa TeKu, por aquello de "allá donde fueres, haz lo que vieres" y presenta un bonito color mandarina, muy turbia, de carbonatación abundante y espuma entre lo compacto y lo jabonoso de color blanco inmaculado.

Acerco la napia con alegría y entusiasmo. Desprende un aroma a mango brutalito. En boca es muy sedosa, con cuerpecito, pero se bebe apasionadamente, máxime cuando te ha costado un pastizal. El alcohol está tremendamente bien integrado (al loro, 10,3%). Predominan los sabores tropicales, con el citado mango protagonizando buena parte del sabor, pero bien flanqueado por una buena dosis de cítricos: naranja y pomelo. Esta peña se ha salido. Costaba 15,46€, pero pillando el pack de 6 se quedaba en 13,44€. Lata de 47,3cl.

14 de octubre de 2022

Sours & Lagers - Sant Cugat


El pasado sábado 8 de octubre se celebró la primera edición del pequeño festival en pequeño formato Sours & Lagers, organizado por cerveses L'Estupenda y el Bar Bocamoll de Sant Cugat del Vallès, en las instalaciones de este último. Alejados de la típica feria cervecera de producto local (que ya existe en Sant Cugat -Sant Q Beer, con varias ediciones a sus espaldas-) la organización ha decidido apostar por un público muy específico y por un producto muy concreto: cervezas ácidas y cervezas de baja fermentación. Personalmente me parece un formato muy acertado, con un producto que en esta etapa de mi vida me apetece mucho y que huye de un formato manido, muy loable y que se agradece, pero manido al fin y al cabo. Soy muy fan del Zwanze Day (lamentablemente este año no he podido asistir por motivos de salud), este mes de abril se estrenó el Rustic & Wild en Santa Pau, que me consta que fue un éxito, y con la llegada del Sours & Lagers se ve una clara tendencia en la organización de eventos cerveceros con un producto diferenciado.

Por el aprecio que le tengo al staff del Bocamoll y de L'Estupenda no podía perderme el evento, y, aunque mis acompañantes fueron baja de última hora, para allí que me fui de todos modos. No tardé en encontrar caras conocidas -entre público y cerveceros- y finalmente acabé disfrutando de una gran jornada birruna.

El día no pintaba nada bien. Esa misma mañana el servicio meteorológico catalán daba tormentas y lluvias intensas en el municipio a partir de la una del mediodía hasta bien entrada la tarde. A todo esto mi razonamiento fue: "-Vete para allá a las doce, y si llueve te vuelves, y si no, te quedas." Por lo menos una horita me daba para algo de birreo, así que me planté allí a la hora de inicio del festival, preparado para todo. Para disfrute del respetable y tranquilidad de los organizadores, no cayó ni una sola gota. Incluso hubo momentos de torrijeta guapa.

El evento estuvo muy bien organizado. En el patio delantero estaban ubicados los grifos de cervezas Lager y en el patio trasero los grifos de Sours. Dentro del Bocamoll se vendían las copas del festi, los tokens, botellas y latas de cervezas de los participantes y camisetas del evento. Se retiraron las mesas y sillas del restaurante y se sustituyeron por otras tipo biergarten. Entrada libre, y copas a 3€. Cada token costaba 1€, todas las cervezas costaban 3, con la diferencia que con las Lagers te llenaban 25cl y con las Sours 15. Como exponentes de las cervezas de baja fermentación participó Les Clandestines de Montferri, La Font del diable, Birrificio Mastino, Maresme y Baias. Como exponentes de las cervezas ácidas asistió Ales Agullons, Màger, Santa Pau y La Salvatge. Hubo varios DJs para amenizar la jornada con sus respectivas sesiones musicales para todos los gustos. Al mediodía estuvo la cosa tranquilita, con un ambiente muy familiar y agradable. Yo me marché a las tres, y por lo que he visto en redes, por la tarde hubo gran asistencia y la cosa estuvo muy animada.

Para aguantar la taja dignamente, la cocina del Bar Bocamoll se mantuvo abierta, y aunque no pudimos disfrutar de la totalidad de su carta, se mantuvieron las patatas bravas, los nachos y los fingers de pollo para el picoteo. Hamburguesas y bocatas de pulled pork fue la oferta para acabar de hacer un poco de cojín en el estómago y no acabar peor que Paris Hilton en Ibiza.


Compartimos una de bravas, nachos y fingers entre los colegas que nos encontramos, y a título personal me pedí el pulled pork, que suele ser mi perdición en este tipo de saraos. Felicitamos a la organización por la iniciativa y deseamos que este formato tengo éxito y finalmente se acabe fijando como uno de los eventos cerveceros clave en nuestros calendarios birrunos. No nos perderemos la segunda edición.

Balance de daños:


-La Font del Diable & Les Clandestines de Montferri - Tokiski. Mi colega Francisco me presentó al maestro cervecero de Les Clandestines y -aunque ya conocía parte de su catálogo- no quise perderme su Bohemian Pilsner, hecha en colaboración con los cerveceros de Vilanova i La Geltrú. Muy rica, muy refrescante y muy bebestible. Todo malta, una gozada. 5,0%.

-Mastino - Monaco. Para continuar la jornada me pedí la Amber Lager de la cervecra de Bussolengo. Dulce, acaramelada, sabrosona y muy rica. Fue de las cervezas que más me gustaron. 5,5%.

-Santa Pau - Brisa de Syrah. Grape Ale elaborada con mosto de uva Syrah proporcionada por los productores de vino ampurdaneses Solo El amor Salvará al Mundo. Acidita, con un punto suave de acético, el Brett marcadete y la uva aportando un sabor afrutado muy rico. 5,5%.

-La Salvatge - Saltamarges. Blend de cervezas de fermentación espontánea de 1 y 3 años en barrica, con una posterior maduración en ánfora. Me la esperaba muy ácida, y por contra, resultó muy placentera, con la acidez muy moderada, el Brett muy agradable, un punto añejo y de acético muy suaves y un rollazo muy guapo. Un gran trabajo. 6,0%.

-Mastino - 1291. Para despedirme del evento decidí volver a las Lagers y volver a disfrutar de la Bohemian Pilsner de la cervecera italiana. Ya había disfrutado de ella este verano en Bocamoll y me apetecía repetir. Ligera, ultrabebestible, muy elegante y con un puntito hoppy que se te va la olla. 4,9%.