En Sant Cugat hasta hace escasos días se daba la paradoja de que teníamos un gran número de cerveceras (Krut, Traginer, Senglaris, Ilda's, L'Estupenda, El Brètol, La Maltista, Florestina y ahora La Fem!) pero no existía ninguna cervecería artesanal donde poder disfrutarlas de grifo. Y cuando digo cervecería me refiero a cervecería, no a restaurante. El problema de la parroquia santcugatenca a la hora del birreo es que no había nada. Si querías disfrutar de una cerveza al mediodía te encontrabas el Xarlot y el Matilda cerrados, ídem a media tarde. Por otro lado este último empezó con una carta brutal en botella, pero debido a estos horarios se las empezaron a comer con patatas y se les caducaban en las neveras, de manera que paulatinamente la oferta en botella fue menguando drásticamente y ahora mismo es muy reducida. La misma suerte corrieron sus grifos. Empezaron pinchando auténticos birrotes, que se acababan estropeando (si no facilitas los horarios para que la gente se las beba pues suceden estas cosas) y ahora mismo solo han quedado la mitad, donde pinchan su propia cerveza, la Ilda's, que ojo, está muy rica, pero el público birruno siempre quiere cosas nuevas, rotación constante, así que la clientela del Matilda no va allí a tomar sus cervezas expresamente, va a comer y de paso se toma alguna (o ninguna y directamente le da al vino). En este escenario se echaba de menos una cervecería con horario de cervecería y con rotación constante de barriles, y también -vamos a decirlo- una tienda especializada.
Este verano la cosa se ha empezado a agitar en la localidad vallesana. Primero abrió sus puertas el Tragaldabas que reseñamos hoy, y unos días después el brewpub La Fem! -que reseñaré en cuanto habiliten su obrador- lo que es una gran noticia para los beergeeks santcugatencs, ya que de este modo se evitan el viajecito a Barcelona, con lo engorroso de los horarios nocturnos del transporte público o el tener que conducir bajo los efectos de la birra. Se sigue echando en falta, eso sí, la antes mencionada tienda especializada que respete la cadena de frío, para poder comprar las cervezas en condiciones y tomártelas en casa, pero en fin, eso es otro cantar, de momento a disfrutar de lo que ahora existe, que no es poco y lo demás, tarde o temprano, ya acabará viniendo.
El Tragaldabas cuenta con 6 grifos de cerveza artesanal y afortunadamente de una extensa carta de bocadillos y tapas para maridar las birras en condiciones. Ya sabéis lo que opino de los mezcladitos del Mercadona. Por cierto, hago un inciso, ¿hay alguien que se coma los garbanzos tostados y las pasas? Continúo. Al estar ubicado a escasos metros de la estación de ferrocarriles, en uno de los puntos de encuentro de la muchachada, hace que tenga gran parte de la clientela asegurada. El hecho de que esté situado en una calle peatonal y cuente con una terraza al aire libre es un plus añadido para los que nos gusta disfrutar de una cerveza tranquilamente sin tener que respirar el humo de los coches y tener a los críos con suficiente espacio para correr sin que nos los atropelle un trailer.
El interior es agradable, decorado en obra vista y madera, que nos transmite calidez. Cuentan con un proyector para poner videoclips que amenicen la tarde o partidos de fútbol. También realizan conciertos en directo. Pese a no ser un espacio especialmente amplio está muy bien aprovechado. Para tomarte una birra rápida te puedes sentar en alguno de sus taburetes cercanos a la barra, y si tienes intención de pasar un rato más largo te puedes sentar en la terraza o en las mesas del interior. Nosotros nos instalamos fuera, ya que era a comienzos de verano y hacía mucho calor y nos apetecía tomar el aire. La idea era catar su oferta en grifo y más tarde acompañarla con alguno de sus bocatas.
En sus grifos suelen tener pinchadas varias Leikeim, que a decir verdad no son santo de mi devoción, de manera que la rotación se limita a los tres grifos restantes, donde suelen pinchar con relativa frecuencia -y para disfrute de un servidor- las Rogue de Newport (casi siempre la Dead Guy Ale o la 7 Hop IPA, pero ayer mismo pincharon la fabulosa Chocolate Stout) también canelita en rama de Nøgne Ø, mucho producto belga (como Lupulus, B.O.M., Val-Dieu, 'T Verzet, Dupont y cosas por el estilo) y alguna Weizen alemana (se echa de menos Weihenstephaner, ahí lo dejo). También hacen aprecio del producto local y suelen tener pinchada alguna cerveza catalana, como Ponent o Espiga, por citar algunos ejemplos. Valoré muy positivamente el hecho de que cuenten con tres medidas: de 20, 30 y 50cl ¡me parece genial! ya era hora de que alguien apostase por el tamaño intermedio.
Me sorprendió que con la primera ronda nos sacasen unas mini arepas con cilantro muy ricas, cosa que agradecí, ya que por estos lares no se estila lo de la tapa gratis, así que fue un gran plus y las fulminamos en nanosegundos. Para acompañar nos pedimos una tapa de yuca crujiente con duo de salsas para mojar, aunque yo personalmente me quedé con ganas de probar sus bravas (es lo que tiene salir con gente, que las tapas a compartir se deciden democráticamente) pero no le di demasiada importancia porque seguramente voy a acabar volviendo repetidas veces, así que no tardarán en caer. Entre sus numerosas tapas también cuentan con ají de gallina, pintxos de carne y verduritas al wok, ceviche de mero, dados de solomillo con foie y pimientos del Padrón, patacones, alitas de pollo con salsa agridulce, micuit de foie con mermelada, surtido de ibéricos con patatas y pimientos del Padrón... vamos, que me tienen todo el día babeando con su instagram.
Con la segunda ronda ya pedimos los bocatas. Yo me decidí por el de cochinillo (que estaba espectacular) con cebolla, tomate, aguacate y su salsita especial. Estaba supermeloso y realmente rico. El resto de la troupe se pidieron varias hamburguesas de ternera y el bocata de pollo. También cuentan con bocatas veggies y un surtido variado de botifarres (de trompetas de la muerte, queso havarti y cebolla; escalivada, brie y salsa romesco; foie, cebolla caramelizada y reducción de Pedro Ximénez; all i oli, guindilla y curry; y la de pimientos a la brasa y brie). Estaba todo riquísimo, pero la verdad es que 12€ el bocata nos pareció caro en comparación con el precio de las cervezas, que sí nos pareció bastante razonable, máxime cuando la guarnición son unas chips. No nos vino por sorpresa porque están todos indicados en su carta y ya sabíamos a lo que íbamos.
Con la segunda ronda ya pedimos los bocatas. Yo me decidí por el de cochinillo (que estaba espectacular) con cebolla, tomate, aguacate y su salsita especial. Estaba supermeloso y realmente rico. El resto de la troupe se pidieron varias hamburguesas de ternera y el bocata de pollo. También cuentan con bocatas veggies y un surtido variado de botifarres (de trompetas de la muerte, queso havarti y cebolla; escalivada, brie y salsa romesco; foie, cebolla caramelizada y reducción de Pedro Ximénez; all i oli, guindilla y curry; y la de pimientos a la brasa y brie). Estaba todo riquísimo, pero la verdad es que 12€ el bocata nos pareció caro en comparación con el precio de las cervezas, que sí nos pareció bastante razonable, máxime cuando la guarnición son unas chips. No nos vino por sorpresa porque están todos indicados en su carta y ya sabíamos a lo que íbamos.
El servicio muy atento y agradable en todo momento ¡así da gusto! Así que con ganas de volver y seguir disfrutando de las Rogue de tirador, que ya sabéis que me encantan. Hasta aquí la reseña de hoy, les colocamos su merecido pin en nuestro Mapa Birruno y les mandamos un saludo al equipo del Tragaldabas. ¡Hasta pronto!
Balance de daños:
-Nøgne Ø - Pining For The Fjords. Fue la primera en caer. Este verano estoy probando muchas New England IPAs y no quería perderme la de los noruegos, máxime siendo de tirador. Estaba espectacular. Muy densita y hazy, ultratropical, vamos, un zumazo. 5,5% y sin resultar en ningún momento nada empachosa. De lo mejorcito.
-Lupulus - Blanche. Witbier muy rica y refrescante con el punto especiado y ese toque belga de las Wit. Muy bebible y perfecta para este bochorno que nos azota 4,5%.
-'T Verzet - Super Noah. Belgian Ale muy rica, muy limpia, afrutada y de trago ligero. Con ese toquecillo de la levadura belga tan característico. 4,9%. Entraba fina, fina, filipina.
Tragaldabas Valldoreix 73, Sant Cugat del Vallès 93 038 82 10
26 de agosto de 2023
Este local ha cerrado definitivamente sus puertas para siempre.