31 de mayo de 2019

Alefarm - Polar Pieces

Continuamos con birrotes épicos. En esta ocasión se estrena en el blog la cervecera danesa Alefarm. Sí hijos míos, hay vida más allá de Mikkeller. Dicha cervecera está pegando fuerte por nuestras tierras, y nos están llegando muchas novedades con bastante frecuencia. El inconveniente a tanta maravilla enlatada es que las chuflan a precios de criptonita, y eso que la de hoy no es de las más caras de los de Greve.

Yonkilata enorme, de medio litraco, por si tenías sed. La servimos en vaso y presenta un color dorado y un aspecto muy limpio, sin turbidez alguna -si te esperabas una hazy te vas a dar con un cantito en los dientes- y con una corona muy abundante pero no especialmente duradera. No es una cerveza especialmente aromática.

En boca podemos disfrutar de sabores herbáceos, también bastante pino y algo de fruta de hueso muy agradable. Es una cerveza con ninguna estridencia, muy suave, muy equilibrada y muy armoniosa. Realmente un trabajo muy fino. Quizás para alguien que busque que el lúpulo le salga por las orejas se le va a quedar corta, pero para el que le gusten las cosas bien hechas le va a encantar. 7,0%. Comprada refrigerada en La Bodega del Sol de Barcelona por 6,41€.

30 de mayo de 2019

Rogue - Batsquatch

Echábamos muchísimo de menos novedades frescas de nuestros ídolos de Newport y por fin nos han llegado dos latitas suculentas que tal y como entraron en mi nevera salieron por mi uretra.

Ya sabéis de sobra que siento especial predilección por la cervecera estadounidense Rogue, que cultiva sus propios cereales y lúpulos, así como todos los adjuntos que le añaden a sus cervezas: moras, fresas, ruibarbo, avellanas, miel y un larguísimo etcétera.

En esta ocasión han elaborado una New England IPA tremenda, sabrosísima y muy bebible. La han bautizado con el nombre de Batsquatch, que por lo visto es un monstruito que alimenta todo tipo de leyendas locales. La idea del equipo de John Maier era elaborar una cerveza en formato lata, perfecta para llevársela de acampada y que pudiese acompañar a los excursionistas mientras explicaban historias de terror alrededor de una fogata.

De color anaranjado y muy turbia, con una abundante capa de color blanco muy persistente que nos deja un bonito encaje de Bruselas. Nada más abrir la lata nos llega un torbellino de fruta tropical. La servimos y disfrutamos del espectáculo olfativo que nos regala este birrote. En boca muchísima fruta tropical, destaca el mango, y también un pelín de piña. También tenemos un saborazo a melocotón espectacular, así como una buena dosis de cítricos: naranja dulce muy intensa al principio y un poco de pomelo al final del trago. Un toque sutil de pino acaba de coronar este birrote épico. Final nada amargo pese a sus 54 IBUs. 6,7%. Una gozada poder disfrutarla así de fresca. Absolutamente espectacular. Comprada refrigerada en La Bodega del Sol de Barcelona por 3,28€.

29 de mayo de 2019

DosKiwis - Pacific Pils

Comenzamos desvirgándonos con un nuevo estilo cervecero que aprobó el BJCP -junto con otros 3- hace unos meses: el New Zealand Pilsner.

La joyita se la compré fresquísima directamente a Michael Jones en las instalaciones de DosKiwis Brewing en Rupià. A falta de referencias neozelandesas de este estilo en nuestras tiendas especializadas, Judit y Michael han dado un paso al frente realizando su aportación al estilo.

De color dorado, nada turbia y con una carbonatación nada excesiva, que nos deja la típica corona de dos dedos de espuma.

Al olfato nos llega un aroma herbáceo muy agradable que nos aportan los lúpulos y también el olor de los cereales. El sabor se decanta claramente hacia el lado del lúpulo. Ligera de trago, muy crushable, de sabor herbáceo y sutilmente floral que me recuerda al de las violetas. Realmente impresionante. Podemos disfrutar también del sabor de la cebada, y finalmente nos deja un amargor final intenso un pelín seco. Estilo muy refrescante, sabroso y a la vez muy bebestible. 5,1%.

28 de mayo de 2019

DosKiwis - Rupià


L'Empordà es uno de nuestros destinos en familia favoritos. Nos encantan sus calas escarpadas de aguas de color esmeralda y ver los pinos prácticamente a pie de playa. Su belleza es inigualable y disfrutar de la gastronomía local se convierte en toda una adicción.

Siempre que tenemos ocasión no nos da pereza alguna, cogemos el coche y nos plantamos allí -no necesariamente en primavera o verano- para disfrutar de todo lo que nos regala a los sentidos esta parte de la geografía tocada por la tramuntana.

El pasado uno de mayo no fue una excepción. Al caer en miércoles, era una ocasión perfecta para un sube-baja libre de domingueros. Nuestro plan era realizar un paseo a pie desde L'Escala hasta Sant Martí d'Empúries, comer unas sardinitas a la brasa en algún chiringuito de la playa, y a eso de las 3 de la tarde, acercarnos a la cervecera DosKiwis para pegarnos un gran homenaje birruno. El planazo perfecto.

Admito que no salimos de casa a la gornú. Antes me aseguré de que estuviera abierto, ya que era un día festivo. La cervecera está ubicada en Rupià, a 20 minutos en coche desde L'Escala, y el leitmotiv de la visita era disfrutar de sus bonitas instalaciones -en una antigua masía- y por supuesto, gozar de su magnífica terraza mientras le dábamos caña a su taproom. La cervecera está ubicada en un enclave único, rodeada de campo y naturaleza que la hacen infinitamente más agradable que visitar cualquier cervecera al uso situada en algún polígono industrial. Así que nada, allí nos plantamos los Castle, a las 3 y poco de la tarde, para tomarnos unas birras after lunch y meternos nuestro chute de endorfinas antes de volver a casa. Here we go.

La cervecera DosKiwis la integran la ampurdanesa Judit Piñol y el neozelandés Michael Jones. Se conocieron en Londres allá por el año 2010. Ambos tenían en común su pasión por todo lo artesanal y, por consecuente, de la craft beer. En 2013 Judit estuvo ayudando a unos amigos a montar su microbrewery en Sídney, donde estuvo viviendo durante una temporada. Allí es donde aprendió a hacer cerveza y a la vez donde conoció a un montón de jóvenes emprendedores que juntos construían una comunidad acogedora y creativa y que a la vez fortalecían el tejido social de la zona. Aquella experiencia fue muy inspiradora para Judit, que tuvo muy claro que allí donde fuese a vivir le gustaría aportar su granito de arena para crear algo parecido.

Mientras tanto, Michael estaba locamente enamorado del Empordà. Cansado de dar vueltas por el mundo cada vez tenía más claro que quería asentarse allí. Finalmente dieron el paso, y motivados por vivir una vida equilibrada, y a la vez disfrutando de los placeres de la vida, empezaron a hacer cerveza en casa (entre otros productos fermentados). El verano de 2014 Michael llevó sus cervezas a la boda de unos amigos en Francia y tuvieron muchísimo éxito entre los invitados, y ahí fue donde se le encendió la bombilla. La pareja empezaba a añorar esas espectaculares cervezas que habían podido disfrutar en Reino Unido, Australia y Nueva Zelanda... ¡así que decidieron elaborarlas ellos mismos! En agosto de 2016 DosKiwis por fin sacó a la venta su primer lote como cervecera nómada. Empezaron realizando sus cervezas en fábricas de otros, pero tenían las ideas muy claras. Su intención era crear un punto de encuentro donde pudieran elaborar sus birras, darlas a probar al público y también compartir un poco de la cultura catalana y neozelandesa. Todo en el mismo lugar.

En febrero de 2019 por fin ven realizado su sueño y consiguen abrir su propia fábrica, ubicada en una antigua masía, reciclando gran parte de los materiales que ya se encontraban en ella. El suelo de madera ha pasado a convertirse en parte de las paredes y en el mobiliario del jardín. Son una pareja muy apañada.

El espacio cuenta con el obrador (con siete fermentadores), una amplia cámara refrigerada, la zona del taproom (donde tienen 12 tiradores para poder degustar allí mismo sus cervezas fresquísimas) y la espectacular terraza, amplísima, con mucha vegetación y con el mobiliario reciclado por ellos mismos. Perfecta para tomarse unas cervezas al solecito. Durante nuestra visita había varios equipos de ciclistas que se estaban hidratando, y es que por aquellas carreteras es un placer circular en bicicleta, disfrutar del paisaje y respirar aire puro... y si al final caen unas birras ya ni te cuento. Triunfeixon.

Las cervezas de DosKiwis se caracterizan por ser modernas, muy fáciles de beber y llenas de sabor. Unas birras muy crushables. Michael me estuvo explicando que no es plan que lleguen los ciclistas, empiecen a beber DIPAs o TIPAs y acaben haciendo eses por la GI-642. Hay que volver sanos y salvos a casa y Judit y Michael velan por nosotros, así que cocinan cervezas de no demasiada graduación.

También es posible comprar allí todas las cajas de latas que nos sean necesarias para continuar la fiesta en casa. De momento cuentan con 7 variedades: ANZAC Spirit (Hazy Pale Ale que ya reseñé hace unos días), Major Leagues (Hazy IPA de 6,5% elaborada con lúpulos americanos), Pacific Pilsner (New Zealand Pilsner de 5,1% que reseñaré mañana casi con toda certeza), Rupinanum (Pale Ale de 5,9% elaborada con lúpulo local y ecológico), Heartbreaker (Sour de 4,7% elaborada con frutas del bosque, fresas y limones) y finalmente Sometimes Always y Sunny Nelson, que podréis leer mi opinión a continuación en el apartado de "Balance de daños". Esto es solo el principio de lo que puede llegar a ser un catálogo enorme. Todo su producto es enlatado. De momento, a falta de enlatadora propia, tienen que utilizar los servicios de Los Bucaneros, que vienen a casa y les enlatan toda la producción.

Estuvimos muy a gusto en sus instalaciones. La conversación con Michael fue muy agradable, y aunque durante nuestra visita había muchísima gente, fue muy atento con nosotros y pudo dedicarnos su valioso tiempo -¡estaba a tope de faena!- para charlar un rato con nosotros. Acordamos que un día más tranquilo volveríamos y así de paso podríamos conocer a Judit. Desde aquí les mandamos un fuerte abrazo a esta pareja y les deseamos toda la suerte del mundo para tirar adelante su bonito proyecto cervecero. ¡Procedemos a colocar su merecido pin en nuestro Mapa Birruno!

Balance de daños:

-Dos Kiwis - Sunny Nelson. Hazy Pale Ale espectacular. Fresquísima, muy afrutada, muy sabrosa, cítrica, floral y con un toque suave de uva que le aporta el Nelson Sauvin. Muy ligera, ultra crushable. Me ha encantado, de momento es la que más me ha gustado de las cinco variedades que he probado. 4,5%.

-Dos Kiwis - Sometimes Always. Hazy IPA muy cítrica, con saborazo a piña, pomelo y un punto herbáceo, riquísima y muy refrescante. 4,5%.

-Slow.Mov - Nitro Cold Brew. Además de birras tienen gran variedad de kombucha, sidra y café cold brew. Mi mujer se tomó una Mahou a la hora de comer y en DosKiwis se tomó un café. Todo muy lógico. Un pelotazo de cafeína brutal para continuar tu ruta en bici. 0,0%.

DosKiwis                Carretera de Parlavà Gi-642  22, Rupià (Girona)              www.doskiwisbrewing.com             636  554  463

26 de mayo de 2019

Arriaca - Imperial Red IPA

Hoy traigo una de las pocas latas de Arriaca que me quedaban por reseñar. Se trata de la Imperial Red IPA, que la cervecera de Yunquera de Henares ha bautizado así, tal cual, en un ejercicio extraordinario de derroche de creatividad.

Cada vez me duelen más las neuronas cuando veo alguna cerveza etiquetada como Black, White o Red India Pale Ale, porque o es Red o es Pale. Pero en fin, lo de la denominación de estilos quizás le corresponde a ciertas entidades que velan -o deberían velar- por ello, yo solo doy mi opinión.

La sirvo en vaso de pinta, presenta un color marrón oscuro, con destellos rojizos y espuma muy abundante y cremosa de color hueso. al olfato nos llega el olor de las maltas tostadas y algo herbáceo que aportan los lúpulos. En en boca resulta muy maltosa, muy tostada, con el toque dulzón del caramelo y la carga herbácea y resinosa de los lúpulos. No me ha parecido excesivamente alcohólica. Tampoco me ha resultado nada fresca, pero en fin, cuando uno compra en según qué sitios ya sabe donde se mete. No me ha flipado mucho, de hecho creo que es la que menos me ha gustado de todas las que he probado de Arriaca. 8,5%. Comprada en el supermercado de El Corte Inglés por 2,25€.

25 de mayo de 2019

Schneider Weisse - Aventinus Eisbock

Hoy vas a pillar la embolia de tu vida. Busca un momento de calma, preferiblemente en soledad, donde no puedas hacer el ridículo en sociedad delante de amigos, familiares o compañeros de trabajo. Hoy os traemos las Aventinus Eisbock de 12,0% de volumen de alcohol.

La cerveza de hoy toma como base la Tap 6 de la casa -Mein Aventinus- una Weizendoppelbock soberbia, de lo mejorcito de la brauerei teutona, a la que somete a un largo proceso de enfriamiento, donde parte del agua de la cerveza queda congelada para ser retirada posteriormente, de manera que nos queda una cerveza mucho más concentrada y en consecuencia mucho más alcohólica.

Admito que cada vez que he bebido esta cerveza he acabado doblado. En boca es una cerveza muy maltosa, de sabor tostado, del sabor a trigo ya no queda ni rastro. Tiene ese punto licoreta que nos deja ese calorcillo en la garganta y que baja hasta el estómago. Muy dulzona, azucarada, acaramelada, y con un sabor potente y concentrado que nos recuerda al de los higos secos, las ciruelas pasas y todo tipo de fruta madura.

Particularmente prefiero la Mein Aventinus original. Ésta hay que buscar el momento adecuado para disfrutarla. Primero, porque no es una cerveza facilona. Y segundo, porque se sube una barbaridad. Comprada en Alcampo por 2,28€.

24 de mayo de 2019

Brasserie d'Achouffe - Houblon Chouffe

Nos vamos a dar una vueltecita por el lado lupulado de la vida. Hoy tenemos por aquí la Houblon Chouffe, que según sus creadores es una Belgian IPA. Belgian IPA pasada de rosca, cabe añadir, ya que su 9,0% de volumen de alcohol supera incluso al de la Chouffe clásica, que ya de por sí pega un pelotazo bastante fuerte. Ésta en concreto lleva lúpulo como para que te rezumen alfa ácidos por los poros.

Color dorado, bastante gasificada y con espuma blanca de aspecto jabonoso y con bastante persistencia.

En boca se nota el saborcillo de lo que podría ser una Belgian Golden Strong Ale de fondo, maltosa, con el toque peculiar de la levadura belga y el añadido de las cannábaceas, más presentes que en un concierto de Cypress Hill. Sabor muy lupulizado, herbáceo y con un final muy seco. La noto también un tanto azucarada -no en exceso- que en parte compensa el marcado amargor final.

Si os gustan las cervezas con mucho lúpulo es posible que os guste. Si os gustan los clásicos belgas y sois bastante abiertos de miras, es posible que os guste. Si por el contrario pensáis que los experimentos mejor hacerlos con gaseosa, no creo que sea vuestra cerveza. Comprada en Wine Palace por 2,69€. Buen fin de semana lectores.

21 de mayo de 2019

Castel - Trigo

A mediados de este mes pudimos disfrutar de un fin de semana en familia en Teruel. ¿Qué cojones hacíamos en Teruel? Cosas de mi padre. El hombre quería visitar la ciudad y le dimos el gusto de llevarlo allí con toda su descendencia y consortes.

El panorama cervecero turolense es verdaderamente aterrador. Lo único que hay en la capital son los cuatro tiradores craft de la Tasca La Parra (y una nevera bastante decente), que es lo único que arroja algo de luz en toda la provincia. Me pasé por dicha tasca el sábado por la tarde -y otra vez por la noche- y me la encontré cerrada en ambas ocasiones, así que no esperéis ni la reseña correspondiente ni el pin en el Mapa Birruno.

A parte de esta decepción mayúscula al menos pude redimirme volviéndome a encontrar con mis ya conocidas cervezas Castel -que ya conocía de un viaje a Albarracín que hice hace 5 años- que estaban presentes en bastantes baretos normales y corrientes del centro. También vi otra marca local -no recuerdo el nombre- en una tienda de la Plaza del Torico pero valía 4 pavos y medio la botella y decidí que mejor hiciese compañía al tendero.

Bueno, a lo que vamos, que en una terraza de un bar del centro pude disfrutar en una cerveza artesana local, elaborada en El Pobo. De Castel ya había probado tres de sus variedades, y en esta incursión mañica disfruté de la de Trigo y me llevé para casa, a un precio más que razonable, su Belgian Dubbel. La que reseño ahora es una Weizen. De color pajizo, muy turbia y con muchísimo sedimento, menos mal que he tenido algo de cuidadín al servirla. Tiene muchísimo gas, que genera muchísima espuma de aspecto jabonoso. Al olfato algo regulero que no he sabido identificar asoma por ahí. Más tarde afortunadamente aparece la banana, tenue pero aparece. En boca el sabor a trigo predomina sobre todo. Entra bastante bien. Me ha parecido una cerveza de trigo bastante decente, y teniendo en cuenta el panorama turolense me ha sabido a gloria. 4,5%.

20 de mayo de 2019

Soma - This Chinook is Different

¡Joder! ¡Y tan diferente! Ya sabéis que no soy muy fan del lúpulo Chinook, pero al tratarse de una Soma no lo dudé. Directa pa la vena.

Ramon y su equipo nos han vuelto a preparar otra New England Double IPA de las suyas cargadita de Chinook. Normalmente las IPAs elaboradas con mucha cantidad de Chinook me tiran para atrás. Es un lúpulo con un alto porcentaje de alfa ácidos, que aportan un sabor muy fuerte a pino y resina, y con un amargor bastante pasado de rosca.

En esta ocasón los de Girona han utilizado el Chinook en dry hopping ahorrándose toda esa tortura para nuestro paladar, obteniendo una cerveza muy sabrosa y nada amarga.

La servimos en vaso de pinta, muy turbia, parece un zumo de piña, poco carbonatada. En boca es muy sedosa y muy sabrosa. Se puede percibir mucha piña, algo de fruta tropical, un punto cítrico agradable y los sabores herbáceos tan característicos del Chinook. Todo muy agradable, intenso pero nada estridente. Entra como la seda. Para los detractores del Chinook -yo incluido- es una reconciliación. Una gozada. 8,0%. Comprada refrigerada en A-Go-Go de Terrassa por 4,95€.

19 de mayo de 2019

Dupont - Saison Cuvée Dry Hopping Styrian Wolf

Cada vez que pruebo una Dupont nueva me engancha aún más. Soy muy fan de su Saison, más aún de su Avec Les Bons Voeux y con esta Saison Cuvée Dry Hopping me han convertido ya en un yonki de la brasserie belga.

El caso de esta cerveza tiene cierta historia. A partir de 2010 a los de Tourpes les dio por realizar una edición limitada de su Saison clásica, pero añadiéndole un dry hopping de un lúpulo determinado. Para darle un halo de misterio al asunto decidieron cada año cambiar el lúpulo para el dry hopping, de manera que cada año la edición fuese diferente y única. La versión que aquí os presento es la de 2018 y está elaborada con el lúpulo estonio Styrian Wolf.

La descorchamos -me encanta descorchar botellas de cerveza, què vols quitidigui- y servimos en copa TeKu con la alegría y estilo que me caracterizan. La cerveza presenta un color pajizo y claro, con bastante turbidez y mucho carbónico, que forma una persistente corona de espuma blanca. El aroma es bastante floral, quizás algo también de fruta tropical que le pueda conferir el lúpulo. En boca muy seca y muy refrescante. Cuenta con el saborazo de la Saison original, pero con toda la fuerza y Rock 'N' Roll que le aporta el Styrian Wolf, que aporta sabores herbáceos con ese punto de pino. Si ya me gustaba la original con ésta lo han acabado de petar. ¡Muy fan de esta brasserie! Comprada en Wine Palace por 2,65€.

10 de mayo de 2019

Mikkeller - Energibajer

Los que más o menos vamos siguiendo a Mikkel Borg -el que parte el bacalao en la cervecera danesa Mikkeller- sabemos que es un chico que está en forma. Le van las maratones y todas estas movidas para runners, y de hecho, en casi todas las sedes de los Mikkeller Bars que hay alrededor de todo el mundo suelen existir los grupos Mikkeller Running Clubs que organizan reuniones para ir a correr y luego hidratarse a base de birras tras una buena sudada.

No ha sido una sorpresa que Mikkeller nos haya sacado la Energibajer, que es una cerveza de 0,0% de volumen de alcohol y está pensada específicamente para recobrar fuerzas tras una buena sesión de trote cochinero. en la etiqueta trasera indica todo lo que un  buen deportista necesita saber: calorías, vitaminas, carbohidratos, etc... no os voy a aburrir con toda esta información, así que vamos a pasar directamente a la degustación.

Se trata de una Wheat Ale de color dorado, no especialmente carbonatada y de espuma blanca y escasa. Nada turbia. Aroma de maracuyá muy agradable. En boca es  muy ligera, cosa que ya me esperaba. El sabor recuerda a fruta tropical -el maracuyá antes comentado- y también cítricos que la hacen muy refrescante. El sabor me ha gustado mucho y además es bastante aromática, cosa que dista de las típicas cervezas aburridas sin alcohol. En cambio sí me falta esa chispa, ese algo, ese punto de gracia que podría aportarle el alcohol, que finalmente si se acaba echando de menos. ¿Es una gran cerveza? No ¿Es buena respecto al resto de cervezas sin alcohol? Sin duda. Y lo mejor de todo es que es una gran opción para los deportistas birrunos, que en ocasiones se tienen que resignar a meterse un Aquarius o una mierda de éstas, así que qué queréis que os diga, quizás no sea mi Mikkeller favorita pero sí a tener en cuenta para esas sesionazas after sport. Comprada en Wine Palace por 2,39€.

9 de mayo de 2019

Spike & Mikrofon - Mangorange

El buen tiempo se está haciendo de rogar, pero tarde o temprano va a empezar a apretar el caloret y nos van a apetecer los estilos cerveceros más ligeros.

Uno de mis estilos favoritos para cuando apreta el Lorenzo es el Berliner Weiße, y creo que la cerveza de hoy hará las delicias de las más adeptas al estilo, ya que viene balanceada con mango y naranja. De ahí su nombre: Mangorange.

Creo que es la primera Berliner Weiße que tomo en formato yonkilata. Dicha cerveza es fruto de la colaboración entre los suecos Spike  y Mikrofon (ambos de Gotemburgo). Ésta última además es la cervecera que ha creado Nikola Sarcevic, que es el vocalista y bajista de la banda de Punk Rock Millencollin. Un chico hiperactivo, por lo que veo. Aquí la Agencia Tributaria ya lo hubiera sajao por pluriempleado, añado.

La sirvo en vaso de Weizen, color anaranjado -parece una Fanta- y muy carbonatada, de espuma efervescente y poco duradera. Al aroma muchísimo mango. En boca es una cerveza ácida como cabía esperar. El sabor que predomina es el de la naranja. También bastante presente el mango, cosa que me alegra. Muy ligera de trago, muy rica en general y perfecta para el verano. 4,0%. Degustada en Tragaldabas de Sant Cugat del Vallès.

8 de mayo de 2019

Castelló Beer Factory - Jano Hop

Lo prometido es deuda, así que hoy os publico una reseña de la magnífica Jano Hop de la Castelló Beer Factory que pude disfrutar (en formato botella) en el taproom de la misma cervecera: el Lupulove de Castelló de la Plana.

Se trata de una New England Session IPA que ha sido elaborada con las maltas Extra Pale Ale, dextrina y trigo y con los lúpulos Citra y Mosaic. La cerveza puede presumir de haber ganado la medalla de oro en el Barcelona Beer Challenge 2019 en la categoría de New England IPA.

De color dorado y con carbonatación abundante de color blanco. En boca resulta muy tropical, donde destaca el sabor intenso del mango. También podemos apreciar mucha fruta de hueso y algo de cítricos (donde encontramos el pomelo). Final no excesivamente amargo (32 IBUs). Me ha parecido una cerveza de un sabor riquísimo, pero he echado de menos esa sedosidad que podría aportar la avena (ausente en la receta) y también algo más de turbidez para que me resulte un auténtico biofrutas, en ese sentido me la esperaba mucho más zumazo. 4,2%.

7 de mayo de 2019

Lupulove - Castelló De La Plana


Hará unos cuatro años ya que escribí la reseña del Va De Cervesa de Castelló de la Plana, que por aquel entonces era la única tienda física de toda la provincia donde se podía comprar cerveza artesana. En aquella remota era, viendo el panorama que emergía en la ciudad de Valencia, predije que todo este furor birruno no tardaría en expandirse a Castellón. Y no me equivoqué. A día de hoy la ciudad cuenta con dos taprooms, dos tiendas especializadas y dos fábricas. La verdad es que nos alegramos de que haya toda esta actividad birruna entre el Ebro y el Carraixet. Así que esta Semana Santa, aprovechando que estábamos de paso por la ciudad, nos fuimos a ir a tomar unas birras al Lupulove. ¡Alegría, alegría!

Mi familia y yo solemos pasar parte de nuestras vacaciones en la localidad castellonesa de Benicàssim, así que cuando me enteré hace dos años y medio de la inauguración del Lupulove fue motivo de alegría y jolgorio para el que suscribe. El motivo de que no lo hayamos visitado hasta ahora -muy a mi pesar- es que cierran en agosto -que es justamente cuando solemos estar nosotros por la zona- y las veces que hemos estado por Castellón en Semana Santa teníamos la agenda de actividades bastante cargadica como para acercarnos a Castellón, máxime cuando uno tiene críos pequeños. Este año, teniendo presente que en agosto tenía todos los números para volver a darme con un cantito en los dientes, me puse entre ceja y ceja la visita obligada al Lupulove. Teníamos que ir sí o sí. Y no fue fácil. Las inclemencias del tiempo intentaron dinamitar nuestros planes. Durante esta Pascua, el primo hermano del Katrina ha estado azotando todo el Levante español, pero a nosotros nos dio igual. Aprovechamos la pequeña tregua climatológica del Viernes Santo y nos fuimos para allá de cabeza ¡todo por la birra!

Lupulove es el taproom de la cervecera Castelló Beer Factory. Según me explica Antonio Carbajo -uno de sus fundadores- su idea primigenia era montar un brewpub, pero las trabas de la administración finalmente hicieron que los cerveceros acabasen descartando esta opción, así que finalmente optaron por montar por un lado la fábrica en la Avenida Barcelona y por el otro en taproom en pleno centro de la capital. Abrieron sus grifos en octubre de 2016, y desde entonces no han parado de servir las birras más brutales. En sus diez tiradores podemos encontrar, además de las cervezas de la Castelló Beer Factory, una excelente selección de las mejores cervezas de todo el globo. ¡Es una auténtica locura!

La cervecería se encuentra ubicada en pleno centro de la ciudad, justo al lado de la Plaza Mayor, donde también se encuentra el Ayuntamiento, el Mercado Central y la Concatedral de Santa María, así que si estáis de visita por Castellón, es muy fácil dejarse caer por allí.

Tiene tres zonas diferenciadas: La terraza, que al estar ubicada en una calle peatonal es perfecta para disfrutar de unas birras tranquilamente al aire libre. La barra, donde podemos pasarnos toda la tarde estudiando su pantalla y su neveraza para decidir qué birra nos vamos a tomar después. Y por último la sala del interior, donde podemos disfrutar de nuestras pintas acompañándolas con alguna de las tapas que preparan en la cocina.

Para que os hagáis una idea de la que tienen liada, además de las cervezas de Castelló Beer Factory tienen: Soma, Espiga, Garage Beer, La Pirata, Yria, Caleya, Zulogaarden, Catalan Brewery, Falken, Guineu, Basqueland, Dougall's, Naparbier, Jakobsland, Montseny, Althaia y Laugar entre muchos otros. A nivel internacional destacamos: Omnipollo, Bevog, Tanker, Oppigårds, Northern Monk, Cantillon, Les Trois Mousquetaires, Alefarm, De Struise, Kees, 3 Fonteinen, Oud Beersel, Hanssens, Boon, Flying Monkeys, O/O, Fifty Fifty, Eviltwin, Mikkeller, Alesmith, Wylam, Buxton, Magic Rock, Beavertown, Fourpure, Partizan, Wild Beer, Tempest, Thornbridge, Amager, Central Waters, Good Guys, Hoppin' Frog, Westbrook, Novo Brazil, Spike, Brewski, 18th Street, Flying Monkeys, Toppling Goliath, Moor, Stillwater, Hitachino Nest, To Øl, Demoersleutel, Cigar City, Põhjala, CR/AK, Rogue... y podríamos pasarnos todo el día así. Un auténtico arsenalaco.

Como el ambiente se iba animando y a nosotros nos pilló con todo el entusiasmo, en pleno subidón, empezamos a pedir y pedir birras y hubo un momento en que tuvimos que pensar en pedir un poco de comida para hacer algo de cojín en el estómago y no acabar muy tajas. Nos decantamos por el surtido de quesos de la provincia -el de trufa y el de cabra con romero estaban de soltar la lagrimita- y los nachos con guacamole. Las cantidades son muy abundantes, no pudimos acabarnos ninguno de los dos platos, y la verdad es que estaba todo riquísimo.


Sobre las nueve de la noche no cabía allí ni un alfiler, y la terraza estaba a reventar de gente. La verdad es que me dio muchísima alegría comprobar in situ que el Lupulove había tenido tan buena acogida en la ciudad. Sin duda han hecho una gran labor de birrangelización entre toda la parroquia de la Plana. Estuvimos muy a gusto, de hecho aún estoy con el subidón mientras escribo estas líneas, y por supuesto con muchísimas ganas de volver las veces que hagan falta. Les mandamos un fortísimo abrazo a todo su equipo y les colocamos su correspondiente pin en nuestro Mapa Birruno.

Balance de daños:

-Soma - Illusion. La verdad es que en cuanto vi la pizarra no me lo pensé dos veces. Soy muy yonki de Soma, lo reconozco, qué le vamos a hacer. Además esta cerveza tenía el aliciente de que no ha sido enlatada, ¡así que no nos la podíamos perder de ninguna de las maneras! New England IPA muy en la línea de Soma: muy tropical, donde predomina el mango,y también mucha fruta de hueso. Tremenda, como de costumbre, y si encima es de tirador pues ya os podéis imaginar. Beergasm. 7,0%.

-Espiga - Blonde. Mi mujer se pidió la Blonde Ale sin gluten de nuestros ídolos de Sant Llorenç d'Hortons. Tremenda as always, máxime de tirador. Podéis leer la reseña que escribí en su día acerca de ella pinchando aquí. 4,5%.

-Castelló Beer Factory - Jano Hop. El camarero que me atendió me recomendó con especial énfasis la New England Session IPA de la casa, que recientemente había ganado la medalla de oro en el Barcelona Beer Challenge 2019. La verdad es que estaba muy rica. Mañana os publico la reseña con muchísimo más detalle. 4,2%.

-Castelló Beer Factory - Golden. Ganadora de la medalla de oro del Barcelona Beer Challenge 2018 en la categoría Blonde Ale. Muy maltosa y con un puntito amargo, muy bebible, perfecta para neófitos que les cuesta salir de su zona de comfort, es una muy buena cerveza para empezar. 4,9%.

-Castelló Beer Factory - Happy Hoppy. Tenía la espinita clavada de cuando me la vendieron fuera de fecha en una tienda de vinos de Benicàssim el añopasado y la verdad es que en un inicio no me gustó, pero por fin he podido resarcirme y probarla en las mejores condiciones posibles. IPA muy rica, muy intensa y muy herbácea con un final muy, muy amargo (58 IBUs). IPA de manual. 5,9%.

Lupulove                Cavallers 3, Castelló De La Plana              www.lupulove.com             964  047  223

6 de mayo de 2019

Sawdust City - Skinny Dippin'

Otra de las cervezas que me envió el supermercado online Ulabox (con más de 300 referencias en cerveza artesana) para celebrar el día de San Patricio fue esta Oatmeal Stout de la cervecera canadiense Sawdust City, de la que hasta la fecha no habíamos catado nada.

Elaborada con agua del lago Muskoka, malta de dos carreras, chocolate (el tipo de malta), Crystal 120, Cara-Foam, Victory, levadura California Ale y lúpulo Magnum. Me encanta su página web porque detalla absolutamente todolo que lleva la receta.

Los de Gravenhurst (Ontario) nos han preparado esta Skinny Dippin' en tamaño yonkilata, perfecta para llevársela al lago Muskoka y pegarse un baño en pelotas bajo la luz de la luna. Básicamente ese es el concepto. Supongo que la cervecera ha puesto su granito de arena a la hora de acrecentar el índice de natalidad en Gravenhurst.

La servimos en copa snifter, presenta un color muy oscuro y una copiosa capa de espuma tupida, cremosa y persistente de color beis. En boca es una cerveza poco cremosa, no es una cerveza con la sedosidad especial que pudiera aportar la avena. Inicialmente predomina el sabor a torrefacto. Sí es una cerveza muy bebible, bastante rica, y aunque la lata es grande no se hace nada cansina. Final no excesivamente amargo (35 IBUs). 5,5%.

5 de mayo de 2019

Vic - I Am A Berliner

Empieza a acercarse la época estival y hay que ir pensando en darle a las cervezas más ligeritas y refrescantes. Uno de los estilos que más me entusiasman para hacer frente a la canícula es el Berliner Weiße, especialmente cuando lleva alguna fruta que me pueda suscitar algún interés en especial.

La Berliner de hoy la ha elaborado la cervecera catalana Vic, y está elaborada con malta Pilsner y trigo y el lúpulo Hallertau Blanc. Las invitadas especiales para la ocasión son las cerezas.

La servimos en copa TeKu, presenta un color rojizo (6 EBC) que me recuerda al Aperol. Al principio tiene una carbonatación vigorosa y efervescente, con espuma blanca y burbuja finísima que desaparece muy rápidamente dejando la cerveza prácticamente desbravada.

Al olfato se percibe el aroma de las cerezas y también del trigo. En boca la sensación es muy ligera. No es una Berliner Weiße especialmente ácida. El sabor de las cerezas es bastante rico y decanta la balanza más hacia el lado del dulce que del ácido. Entre que es una cerveza muy ligera de trago, era poco ácida y que había perdido prácticamente todo el gas, la sensación en boca era la de una cerveza un tanto aguada. Me ha parecido rica de sabor pero la verdad es que me la esperaba mucho más ácida y muchísimo más cañera. 10 IBUs. 4,0%. Comprada en Wine Palace por 2,29€.

4 de mayo de 2019

Basqueland, Track, Left Handed Giant & North - Four Layer Cake

Hoy os traemos una colaboración a cuatro bandas entre la cervecera de Hernani Basqueland con sus colegas de UK: Track (Manchester), Left Handed Giant (Bristol) y North (Leeds). Visto así me ha recordado a la letra del tema North de mis adorados The Cult.

La cerveza se llama Four Layer Cake, se trata de una Stout a la que le han añadido chocolate y sal marina. Si habéis probado el chocolate con un puntito salino, habréis visto que tiene su rollo, y supongo que las cuatro cerveceras han intentado plasmarlo en su versión líquida.

La servimos en el que fuera el último uso de mi vaso de Stout antes de morir (es lo que pasa cuando no friegas tu instrumental tú mismo a mano). Presenta un color totalmente negro y con una capa muy abundante, cremosa y persistente de color marrón claro.

En boca al principio lo que me ha llegado básicamente ha sido muchísimo torrefacto. Más adelante, conforme se va calentando, aparece el sabor intenso del cacao puro, muy rico, algo de regaliz muy suave y el rico sabor del café. Final bastante amarguete (50IBUs). No he encontrado la sal marina, sinceramente. Me ha parecido una Stout rica, sin más, y a decir verdad, viniendo de la unión de cuatro cerveceras me esperaba bastante más. 7,6%. Comprada en Wine Palace por 2,79€.

3 de mayo de 2019

Soma - Is That Sabro!?

El birrote del que hablamos hoy ha marcado un antes y un después en la vida del que suscribe estas lineas. Por el nombre -Is That Sabro!?- intuyo que es una cerveza single hop Sabro, lúpulo hasta la fecha desconocido por mí, y a decir verdad, me ha dejado muy flipado. Primero por lo rica que estaba la cerveza, y segundo porque se salía bastante del sabor -más o menos en la línea- de la mayoría de NEIPAs que he probado. Soma lo ha vuelto a petar.

Soy el primero que admite que la mayoría de las cervezas de los de Girona me saben igual. Esto no lo digo como dato negativo, ya que me parecen todas de putísima madre, pero sí es cierto que el producto del equipo de Ramón -insisto, de una calidad impresionante- es bastante lineal en cuanto a recetas se refiere. En esta ocasión vuelven a repetir con su enésima New England Double India Pale Ale, pero que para mí, me ha parecido a destacar entre todo su catálogo, y que me ha puesto mirando para Cuenca. Beervana.

De color anaranjado y muy turbia, efectivamente parece un zumazo de melocotón o algo parecido. No está demasiado carbonatada, lo suficiente como para formar un dedito de espuma blanca. Al olfato me ha parecido muy sorprendente. Es un torbellino de fruta espectacular, pero me ha dejado descolocado por la cantidad de fruta que no he podido identificar y por lo diferente de los registros. En boca es pura fruta, quizás podría identificar el melón, pero más que identificar varias frutas una por una el conjunto en sí me ha recordado muchísimo los zumazos que me hago de vez en cuando con la licuadora, especialmente uno que me sale muy bueno que lleva naranjas, kiwis, manzana y melón. Pues me sabía a ese zumo. Es de lo mejor que he disfrutado este año. 8,2%. Comprada refrigerada en el A-Go-Go de Terrassa por 4,95€.

2 de mayo de 2019

Matmor - Elephant's Choice

Hace más de un mes volví a hacer otra visitaza al Tragaldabas de San Cucufate, donde además de ponerme fino a birras pude disfrutar de una de sus hamburguesacas que tienen para maridar. Un lujazo.

Entre las birras que cayeron estaba la Elephant's Choice de la cervecera madrileña Matmor, que se estrena hoy en el blog. Los de Alcalá de Henares empezaron como homebrewers haciendo cerveza en el garaje de su casa y tras ganar varios concursos se vinieron arriba y empezaron a elaborar lotes más grandes como gipsy brewers. La de hoy está hecha en las instalaciones de la cervecera manchega Arriaca.

Se trata de una IPA bastante turbia elaborada con los lúpulos Simcoe, Willamette, Magnum y Mosaic.

En boca predominan los matices herbáceos, bastante intensos, pero el Mosaic hace acto de aparición aportando muchos matices cítricos al conjunto,como el pomelo y la piel de naranja, que le aportan más frescor a la receta. El final me ha parecido muy amargo (90 IBUs), yo me la he trincado sin problemas porque ya estoy acostumbrado a estas movidas, pero entiendo que a alguien le pueda resultar excesivamente amarga. En general me ha parecido una IPA bastante rica, ¡bravo por la valentía de estos homebrewers! 7,1%.

1 de mayo de 2019

Goose Island - Matilda

Hasta hace relativamente poco Goose Island era una de esas cervezas que era imposible de encontrar en España. Desde la adquisición de la cervecera de Chicago por parte del gigante AB-InBev me da a mí de que la vamos a ver por territorio nacional con bastante más frecuencia. La de hoy es mi primera toma de contacto con la cervecera estadounidense y para corroborar el dato apuntado anteriormente informo que la compré en El Corte Inglés de Castellón De La Plana y no en ninguna tienda especializada. Venía en un pack de 4 cervezas con motivo del día del padre que distribuía la tienda de cervezas online Hopt y tenía un precio muy asequible: 10,20€. Como la fecha ya había pasado y se habían comido con patatas algunos packs restantes lo habían rebajado a 8,95, así que no me lo pensé dos veces y se vino para casita.

La primera cerveza del pack que me abrí fue esta Matilda, con una botella bastante currada -todo hay que decirlo- que ha acabado en el contenedor verde de todas formas. ¡Viva el planeta sostenible! Se trata de una Belgian Ale a la que le han añadido Brettanomyces para darle una vuelta de rosca hacia el lado más Sour de la vida.

De color caramelo y con una generosa capa de espuma de color blanco roto. Burbuja finísima. Al olfato nos llega el aroma de las maltas y ese toque belga tan característico. En boca es una cerveza maltosa y dulzona como cabía esperar, todo muy belgian style. Mucho caramelo también , y en general bastante rica. El bretta hace su aparición estelar aportando al conjunto ese rollo especial sin que la cosa se vaya de madre, una acidez dentro de lo soportable. Finalmente nos deja un sabor en boca un tanto seco. Me ha parecido una cerveza bastante interesante, por un lado tienes una Belgian Ale bastante rica y por el otro ese twist que le aporta el Brettanomyces. La única pega que le encuentro es que el final me ha parecido un tanto flojo, incluso podría decir un tanto aguado (acaba totalmente desbravada y sin gas), me hubiese gustado un pelín más cañera, no necesariamente más alcohólica, pero sí un pelín más intensa, sobre todo al final. Al contrario que muchas Belgian Ales el alcohol está perfectamente integrado. 7,0%.