Estás más tieso que la mojama y no te apetece hacer de chapero para subvencionarte tu dosis lupulil, ¿qué puedes hacer? Pues tendrás que tirar de baratini y tirar de clásicos a buen precio sin tener que renunciar a un ápice de calidad. Hoy os lo ponemos fácil con la Tripel Karmeliet, una cerveza espectacular que podéis adquirir por unos 2,55€.
En alguna página de rating cuñao la colocan como la mejor Abbey Tripel del mundo. Curiosamente el gigante cervecero AB InBev es propietario tanto de dicha web como de la Browerij Bosteels, la cervecera que ha elaborado la cerveza, ahí lo dejo. Pero que vamos, sin querer desmerecer la calidad de la cerveza, que es fenomenal.
Los de Buggenhout llevan elaborando esta cerveza desde 1996 basándose en una receta de 1679, ¡coño!, del Siglo XVII, seguro que Arturo Pérez-Reverte ha tenido una erección. De color dorado y con una cantidad muy abundante de espuma blanca y persistente. A falta de cáliz (se aceptan donaciones) he utilizado la versátil copa TeKu.
En boca es una cerveza deliciosa. Predomina el saborazo dulzón de las maltas, muy intenso, con notas de caramelo. Entra finísima, sin resultar en ningún momento empalagosa, con el punto de la levadura belga perfecto, aportando ese sabor tan especial pero sin resultar nada fuerte. El alcohol está tremendamente bien integrado, ojito, 8,4% que entran que ni te enteras. Perfecta para disfrutar una tarde haciendo encaje de bolillos con la tieta Vicenteta. Comprada en A-Go-Go de Terrassa.
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