8 de febrero de 2023

Siemàn - Incrocio Bianco

Saltamos de los Estados Unidos hasta Italia, un país muy cercano, peeeeeero, a la hora de encontrar cervezas italianas en nuestras tiendas especializadas no hay una mierda. No sé qué cojones pasa con la distribución de cerveza italiana en España, ya que incluso las más conocidas, como Baladin o Birra del Borgo cuestan muchísimo encontrarlas. Habría que hablar con el equipo de Cuarto Milenio para que nos arrojen algo de información al respecto.

Teniendo en cuenta esto, de milagrito, muuuuuuy de milagrito, uno va una buena mañana a la General de Begudes de Valldoreix y se encuentra en sus neveras un botellón de Siemàn. Pues te vienes pa casita, maja.

Siemàn es una granja ubicada en Vicenza (Veneto) fundada por los hermanos Marco, Daniele y Andrea Filippini. Tienen nueve hectáreas de viñedos en terreno montañoso, en las colinas Berici, donde cultivan variedades de uvas autóctonas para preservar el patrimonio gastronómico territorial. No usan ni pesticidas ni ningún otro agente químico. De esos viñedos salen unas uvas que utilizan para elaborar vinos naturales, y una pequeña parte la reservan para elaborar cervezas, concretamente Italian Grape Ales, un estilo de cerveza autóctono reconocido por el BJCP, que utiliza el mosto de uva para fermentarlo junto al mosto de cebada.

La de hoy es la primera toma de contacto con la Farmhouse italiana. La joyita se llama Incrocio Bianco, es una cerveza de fermentación espontanea, con levadura salvaje local. La cerveza madura durante 12 meses en barrica de roble, y posteriormente se le añaden las variedades de uva Garganega, Tai Bianco, Moscato Bianco e Incrocio Manzoni.

La sirvo en copa TeKu con arte gracia sidrera y... flu flu flu flu flú, no sube el carbónico. Me esmero escanciando todo lo que da mi brazo de sí pero la cosa no remonta. Lo máximo que consigo sacarle es un dedito de espuma tímido, que, cuando me dispongo a hacer la foto prácticamente ya ha desaparecido. Color pálido, nada de retención del carbónico... a ver qué tal.

En boca es moderadamente ácida, con un puntito de limón muy rico y refrescante. El sabor está protagonizado claramente por la uva, la piel de ésta y un marcado sabor a vino blanco. Al quedarse sin gas nos recuerda más a un Albariño que a una cerveza al uso. Me ha faltado más madera, me ha faltado más complejidad. La verdad es que tenía las expectativas muy altas y, siendo honesto, me ha decepcionado un poco. La cerveza está muy rica y la hemos disfrutado, pero me esperaba mucho más. 6,4%. 14,40€. Botella de 75cl.

No hay comentarios:

Publicar un comentario