Durante la primavera del año pasado los amigos de Art Cervesers decidieron hacer las Américas para ver qué se estaba cociendo al otro lado del charco y también para exportar su producto, me consta que su Toc d'Espelta está siendo un exitazo en los USA.
Al igual que los indianos, regresaron a la madre patria cargados de riquezas, en este caso de sabiduría birruna, y esto lo plasmaron en su nueva IPA, la Indiana, una India Pale Ale más americanizada que su hermana Flama -que es más british- pero también con el toque personal de los cerveceros de Canovelles.
La Indiana está elaborada con malta de cebada y trigo, y además con harina de algarroba como ingrediente peculiar de esta receta, el toque catalán tenía que aparecer por algún lado, de ahí el subtítulo IPA catalana.
La Indiana es una IPA peculiar a la par que intensa y rica en matices. Muy gasificada, al olfato nos llega un olor a lúpulo herbal y floral muy agradable. El cuerpo -se puede apreciar en la fotografía- es intenso, de color pardo, nos deja parte del poso espolvoreado por encima de la espuma como la canela en la leche merengada. En el paladar nos llega todo el sabor intenso, sin máscaras, de la malta tostada, con la peculiaridad que más que a café, me han recordado ciertos matices más similares al chocolate, y cierto sabor que no he identificado, que posiblemente sea la algarroba. Lo mismo me da por ponerme un pañuelo en la cabeza y una chirla en la faja -Curro Jiménez style- y echarme al monte en busca de algarrobas para ver a qué saben, porque la verdad es que no tengo ni idea. Cosas de urbanitas. En definitiva, una IPA bastante intensa y completita, bastante diferente a su hermana Flama. 6,2% bastante adecuados a sus características.
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