Pufff ¡qué locura! Reconozco que hace unos años no era muy de Belgian Ales, motivo principal de haber postergado tanto nuestro primer viaje Bruselas. Pero a la que le he pillado el gustillo... ¡ay mi madre!
Pues eso, que con este tiempo gélido tenía muchísimo mono de Belgian Ales, así que me he hecho con un surtidazo de la cervecera De Dolle, que tenía injustamente olvidada desde hace 6 años y medio -no sé por qué, cosas que pasan- la única vez que apareció por el blog fue con su magnífica Stille Nacht, pero que vamos, voy a resarcirme de buena manera. Estad pendientes durante este mes de diciembre y el próximo enero que van a caer unas cuantas.
Comienzo por la Lichtervelds, que es una Belgian Strong Blond Ale. Al servirla en copa TeKu presenta color rubio, bastante turbia, y muy gasificada, de manera que genera una gruesa capa de espuma blanca, muy tupida y cremosa. Muy buena retención, burbuja fina y sensación picante en la lengua hasta el final de la degustación.
En aroma mucho cereal y el peculiar toque belga. En boca es una cerveza con cuerpo, con cierta sedosidad, domina el sabor el cereal, aunque es bastante notable la levadura. Sensación alcohólica durante toda la cata (9,0%) y la verdad es que se sube. Al final nos deja una sequedad extra que a mí me ha encantado. Muy rica y muy buena manera de reprender nuestra relación con la brasserie de Esen. Comprada online en el Super Sol de Gràcia por 4,10€.
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